Poner la toalla en una playa, disfrutar de las vistas y relajarse con el sonido de las olas es un privilegio que mucha gente, todavía, no sabe valorar. Y es que cada vez es más habitual ver cómo numerosas playas sufren la falta de respeto de quienes las visitan. Es el caso de Punta Xinxó, en Cala de Bou. Allí podemos ver un auténtico «supermercado de basura» que ofrece desde botellas de agua y latas de cerveza hasta pajitas, chicles, colillas y envoltorios. «El problema no es solo de los turistas que nos visitan. He recogido hasta bobinas de hilo de pescar y eso es muy difícil que sea de gente de fuera», explica Jema Marsh, residente en la isla.
Marsh visita cada mañana, desde hace unos días, esta zona de Sant Josep para adecentarla. Lo hace a primera hora, con el amanecer para ella sola y con la satisfacción de ayudar para el bien común. «Empecé porque veía que nadie lo hacía y es necesario porque sino se va todo al mar», cuenta esta inglesa que lleva ya 16 años residiendo en Ibiza. Tanto es así que en tan solo cinco minutos de reloj llena, con la basura que encuentra entre las rocas, una bolsa entera. «Cada vez somos más personas en el planeta por lo que la contaminación claramente es mayor. Nos tenemos que concienciar porque ya estamos viendo cómo está el planeta».
En este sentido, Marsh considera que empezar por concienciar en los colegios solucionaría muchos de los problemas actuales. «Si enseñamos desde que son pequeños que esto está mal hecho, cuando lleguen a nuestra edad lo tendrán asimilado y no lo harán», dice. Esta joven solo ve excusas en una sociedad que parece que vive «con los ojos cerrados». De hecho, ha tenido que escuchar en numerosas ocasiones cómo muchos se escudan en el hecho de que «ya hay quien cobra un sueldo por limpiarlo», pero «si esperamos a que otro tenga que hacerlo, el problema no se va a solucionar».
Ante esta situación, Marsh critica al Ayuntamiento de Sant Josep por no invertir en «soluciones». «Se preocupan en hacer un paseo que se va a comer la costa y no en los problemas que tenemos con la basura y el reciclaje», insiste. Además pide que se instalen pequeñas papeleras en las playas «que permitan reciclar a todos los que queremos hacerlo». Y es que en el caso de Punta Xinxó solo hay una bolsa atada a un mástil para poder tirar la basura.
Ella sabe que el problema de suciedad no lo sufre solo este municipio, sino también el resto de la isla. «Me gustaría, de verdad, que la gente se preocupara un poco más por el gran regalo que tenemos, que es la Tierra, y aportase su granito de arena para que próximas generaciones no tengan que caminar entre basura», concluye.
Datos
Según los datos facilitados por el departamento de Medi Ambient del Consell d'Eivissa, en los seis primeros meses del año, la cantidad de residuos recogidos selectivamente (papel, envases y vidrio) en la isla, ascienden a un total de 8.416 toneladas, lo que supone un 16% más que en el mismo periodo de 2016.
En cuanto a municipios, Sant Josep y Santa Eulària son los que más reciclan (17%), seguidos del municipio de Ibiza (16%), luego Sant Joan (12%) y, el que menos lo hace, Sant Antoni (7,5%).