Miquel Fiol Sala (Porreres, 1949) acaba de renovar en el cargo de director científico del Institut d'Investigació Sanitària Illes Balears (Idisba) por un periodo de cuatro años más. El doctor Fiol es, además, investigador principal en el CIBERobn (Centre d'Investigació Biomèdica en Xarxa sobre Fisiopatologia de l'Obesitat i Nutrició) y director del registro Codi Infart de les Illes Balears.
¿Por qué estudió Medicina?
—Me gusta la medicina. Estudié en Valladolid con unos compañeros míos de la familia Darder. Hice la especialidad en Cuidados Intensivos y Cardiología en Sant Pau (Barcelona) y en 1976 vine a Mallorca a trabajar, concretamente en Son Dureta, porque se crearon plazas de Cuidados Intensivos, sector en el que he trabajado, especialmente en la Unidad Coronaria.
¿Es complicado ser el director médico del Idisba y al mismo tiempo atender pacientes?
—No tengo mucho tiempo para atender pacientes. Tengo una consulta en la Clínica Rotger, en la que en 1998 monté el Servicio de Cardiología, pero ahora sólo puedo ir dos días a la semana.
¿Le ilusiona el reto de estar cuatro años más al frente del Idisba?
—Ya he estado cuatro años y sí que me ilusiona seguir, tenemos que consolidar el Institut.
¿Cómo se creó el antiguo Idispa y por qué el cambio de nombre?
—El Institut d'Investigació Sanitària de Palma (Idispa) se puso en marcha en septiembre de 2013. En esta legislatura se decidió el cambio de nombre por el de Institut d'Investigació Sanitària de Balears (Idisba), a pesar de que el Instituto Carlos III no es partidario de que los institutos tengan nombre de comunidades autónomas, pero se hizo una excepción. El Idisba engloba a los investigadores de los hospitales Son Espases, Son Llàtzer, Atenció Primària y el IUNICS (Institut Universitari d'Investigació en Ciències de la Salut) de la UIB. El Idisba tiene actualmente 54 grupos de investigación, 17 son de la UIB. Contamos con un total de 596 investigadores en activo.
¿Cómo ha evolucionado el Idisba en estos cuatro años?
—Creo que ha evolucionado mucho y para bien. En cuatro años ha cambiado muchísimo. Empezamos con escasa financiación, sin estudios de Medicina en las Islas y con dificultades para el futuro mantenimiento de las infraestructuras. Ahora tenemos una buena financiación, hemos conseguido más becas, y el IB-Salut se hace cargo de la financiación de las infraestructuras. El cambio es total.
¿Qué ha supuesto para la investigación la puesta en marcha de la Facultat de Medicina ?
—La Facultat de Medicina es muy importante para la acreditación del Idisba como instituto del Carlos III. La acreditación la presentaremos en el primer trimestre de 2018. La tramitación puede durar medio año hasta que nos acrediten definitivamente. Tenemos todos los papeles en regla y los estudios de Medicina que están funcionando bastante bien. Sin la Facultat de Medicina no nos podríamos acreditar.
¿Y qué supone estar acreditado por el Instituto Carlos III?
—Conseguir muchas más ayudas. Ahora las tenemos más limitadas. Con la acreditación podemos acceder a muchas más convocatorias.
¿Cuál es la labor más inmediata que tiene que poner en marcha como director científico?
—Lo primero es cerrar el tema de la acreditación. Además, nos hemos propuesto la reorganización de los grupos y las áreas de trabajo, identificando las líneas prioritarias. También vamos a poner en marcha la creación de un Consell Social asesor, con 25 miembros, compuesto por representantes de las asociaciones de pacientes, hostelería, pymes, grandes empresas, para que la sociedad sepa el trabajo que estamos realizando y con el objetivo de aumentar las posibilidades de captación de fondos y favorecer la traslación de la investigación a la sociedad en general y las empresas en particular. Queremos presentar la actividad del Idisba a cada uno de los servicios asistenciales de las entidades que lo constituyen.
¿Cree que se conoce el trabajo de investigación que están llevando a cabo?
—Si que se conoce, pero queremos darlo a conocer todavía mucho más.
¿Cuáles son las principales líneas de investigación que están llevando a cabo actualmente?
—Estamos trabajando en siete grandes áreas: Bioingeniería y Cirugía Experimental; Epidemiología Clínica y Salud Pública; Enfermedades Infecciosas e Inmunológicas; Enfermedades Metabólicas y Nutrición; Enfermedades Respiratorias y Cardiovasculares; Neurociencias y en Oncohematología.
¿Con qué presupuesto anual trabaja el Idisba?
—Contamos con un presupuesto anual de 4,5 millones de euros.
¿Basta el presupuesto?
—Siempre optamos a más, pero la verdad es que hemos mejorado mucho. Antes el dinero que conseguíamos de la Conselleria de Salut no bastaba ni para pagar las nóminas del personal. Ahora bastan e incluso hemos podido hacer varios proyectos. Por ejemplo, a través del SOIB (Servei d'Ocupació de les Illes Balears) hemos podido contratar a 23 jóvenes en paro cualificados. Además, hemos convocado varios proyectos, organizado seminarios, sesiones generales y jornadas de investigación.
¿Cómo vivió la polémica de Podemos con Bachiller?
—Lamentando que nos pusieran a nosotros por en medio. La verdad es que se tenía que desmontar la instalación de investigación del Hospital Joan March porque el gasto de mantenimiento era enorme y sólo quedaba un investigador.
DNI
• Miquel Fiol combina su trabajo como director científico del Idisba con la dirección de tres tesis doctorales.
• Es un apasionado de la música, desde el rock a la ópera, escucha mucha música clásica y rock. Confiesa que, a parte de médico, le hubiera gustado ser cantante de rock.
• El cine es otra de sus grandes pasiones, pero va poco porque tiene mucho trabajo. Le gusta leer pero ahora solo tiene tiempo para los libros de Medicina.