En Ibiza existen dos enfermedades transmitidas por mosquitos que pueden provocar el desarrollo de una enfermedad muy grave para la salud de nuestro perro, una es la leishmaniasis y la otra es la filariosis ó gusano del corazón. En el artículo de hoy repasaremos a modo e pregunta las dudas más frecuentes que abordan a los propietarios de mascotas cuando hablamos de esta patología.
¿Qué es la Filariosis?
La Filarosis es una enfermedad parasitaria transmitida por la picadura de un mosquito determinado, el llamado Anopheles. La Filariosis a pesar de ser una enfermedad típica de los perros, ya está demostrado que puede afectar a todas las especies de mascotas y además ser transmitida durante todo el año ya que la existencia de los mosquitos activos en los llamados nidos de calor se da en todos los meses, no sólo en los estivales, estos mosquitos viven en zonas con acumulación de agua estancada, ya que ponen sus huevos en ésta, como pueden ser las feixas, las balsas de riego o os estanques y fuentes de nuestras casas. Aunque la patología mas conocida es la que afecta al perro, se ha demostrado que los gatos también pueden padecer esta enfermedad y que en ellos suele ser asintomática y solo manifestarse cuando el estado es muy avanzado y muchas veces letal.
¿Cuales son los síntomas de la Filariosis?
Una vez que el mosquito con la fase del parásito infectiva pica a la mascota, dicho parásito pasa a la sangre del animal donde se va desarrollando hasta llegar a la forma adulta que es el famoso “gusano del corazón”. Estos gusanos de hasta 30 cm de largo se alojan en las cámaras cardiacas y según su número pueden pasar un tiempo sin provocar síntomas. Una vez que bien por localización de los parásitos o por aumento en su número empiezan los síntomas, lo que apreciamos son síntomas de insuficiencia cardiaca y/o respiratoria. Cuando el perro comienza a manifestar los síntomas la enfermedad suele estar ya muy avanzada, debemos fijarnos si nuestro perro se cansa más de lo normal, si jadea con frecuencia y si empieza a adelgazar de la espalda y las costillas pero por el contrario tiene un abdomen muy abultado.
¿Cómo se diagnostica la Filariosis?
El diagnóstico es sencillo, se realiza con una analítica de sangre y se puede ver el resultado rápido. Consultemos a nuestro veterinario sobre la incidencia de la enfermedad en la zona en la que vive el perro y sobre la mejor hora para realizar la extracción de sangre para realizar el test. Las larvas de filaria circulan por el torrente sanguíneo pero no de forma continuada, tiene ciclos de eliminación por lo que debemos sacar sangre en determinadas horas del día para poder verlas.
¿Cómo prevenir la Filariosis canina?
Esta enfermedad tiene una prevención muy eficaz. Según la especie y el tipo de vida de la mascota (residencia habitual, viajes, etc.) se aconseja un tipo de prevención u otro, habiendo principalmente dos tipos:
• Un tratamiento preventivo que se aplica inyectado una vez al año, muy seguro y que nos permite ganar la mayor tranquilidad, ya que da igual nuestra zona de residencia o de desplazamientos vacacionales, siempre tendremos protegida a nuestra mascota.
• Un tratamiento preventivo aplicado mensualmente, principalmente usado para mascotas que viven en zonas de todavía baja incidencia de la enfermedad y que se desplazan a zonas de riesgo.
Filaria en España: Zonas de riesgo
Tradicionalmente era una enfermedad endémica de la zona este y sur de España, donde había un hábitat propicio para el desarrollo del mosquito.
Con el paso del tiempo se está extendiendo hasta implantarse prácticamente en toda España, esto es debido al cambio climático, a la existencia de los llamados nidos de calor que hemos mencionado antes, y al cada vez mayor desplazamiento de mascotas.
En Ibiza la filariosis canina tiene un patron de distribución muy definido. En la zona de ses Feixes, Jesus y Puig den Valls y en la zona de ses salines, aeropuerto y plana den fita.
Si su animal vive en esas zonas o usted pasea a menudo por esa zona debemos proteger a nuestro perro o a nuestro gato contra su contagio.