El Ayuntamiento de Eivissa llevó a cabo ayer por la mañana un simulacro para evaluar el procedimiento de actuación en caso de vertidos por hidrocarburos en Platja d'en Bossa.
Se trata de una acción más procedente de la implantación de un Sistema de Gestión Ambiental según la norma internacional ISO 1400, y cuya Certificación situaría al municipio de Vila como organización socialmente responsable. Un protocolo que «se está llevando a cabo desde el año pasado en todas nuestras playas y en Talamanca desde 2010», según explicaba la concejala de Medio Ambiente, Montse García, momentos previos al simulacro.
Durante éste, se simuló el naufragio de un barco en alta mar, frente a Platja d'en Bossa, y como las corrientes trasladaban los restos de la embarcación y las manchas de hidrocarburos a la orilla. Para ello se emplearon maderas y para la mancha, agua con colorante alimentario.
Ante la atónita expectación de los centenares de bañistas, en el simulacro participaron técnicos de Medio Ambiente del Ayuntamiento, socorristas y operarios de limpieza de la empresa que opera en el municipio, Valoriza. «Lo estamos haciendo en plena temporada porque así ponemos a prueba situaciones que podrían ocurrir en estos momentos, cuando más gente y más embarcaciones hay», remarcaba la concejala.
Los efectivos actúan a nivel de costa, sobre los restos y sobre todo sobre el vertido de hidrocarburo y tratan de recogerlo antes de que llegue a la playa. Los socorristas, además, se adentran en el mar con la lancha para averiguar si hay más restos.
De forma más concreta, Sandra Romero, técnica del Ayuntamiento de Eivissa explica cómo proceden exactamente, «lanzan los supuestos contaminantes cerca de la orilla, entonces el socorrista los avistará desde la torre de vigilancia. Lo primero será alertar a la gente que se encuentra en la zona y colocar la bandera roja. Seguidamente, el socorrista avisará al Ayuntamiento y los técnicos de Medio Ambiente contactarán con Valoriza para que se trasladen a la zona. En caso de que la barca detecte más vertidos se seguirá el mismo procedimiento, evitando que llegue a la costa y en caso de que el contaminante sea de mayor envergadura se avisará a emergencias a través del 112 y se colocarían barreras, entre otros procedimientos de mayor envergadura». Para el socorrista que actuó en el simulacro, Javier Montilla, «ésta es una buena iniciativa porque estas intervenciones siempre son buenas. Ya en el curso de socorrismo damos estos temas, pero el Consistorio nos ha hecho hacer una formación especializada sobre medio ambiente. Lo que hacemos nosotros es, una vez localizada la mancha, acotamos la zona, avisamos a los usuarios de que no se bañen por ese lugar y también salimos con la embarcación para averiguar si hay una mancha más grande y cuál puede ser la fuente de la más pequeña».