«El problema se produce básicamente en la zona de Sant Jordi y la zona del aeropuerto, aunque la red de fecales está separada de la de pluviales», explicó Josep Marí Ribas, alcalde de Sant Josep. Esta es una de las principales novedades que se conoció ayer tras la reunión mantenida entre el Ayuntamiento y Abaqua para buscar una solución a los vertidos fecales del Parc Natural de ses Salines.
Según apuntó ‘Agustinet', «en episodios fuertes de lluvia las aportaciones son extraordinariamente importantes», pasando de los 900 metros cúbicos diarios a los 6.000 que se registran en algunas ocasiones. Ante esa situación, que de momento no saben a qué se debe ni cuál es su origen, desde el Consistorio señalaron que llevarán a cabo tareas de control, inspección e investigación con sistemas manuales, mecánicos y cámaras para localizar el problema. «Que estos episodios de lluvia coincidan con las aportaciones pluviales hace que cuando llega a la depuradora no tenga capacidad para esta aportación extra. Lo que pasa es que se colapsa y hay pérdidas que provocan estos vertidos en las fincas agrarias y en el Parc Natural», matizó.
También quiso destacar que «lo que es difícil de creer es que porque haya algunas viviendas o establecimientos que puedan tener conectadas las pluviales a las fecales haya un aporte tan extraordinario».
Lo que quedó claro tras el encuentro es que la responsabilidad es del Ayuntamiento al tratarse de un colector de titularidad municipal. «Es aquí donde se sale el agua y el Ayuntamiento deberá actuar con nuestros técnicos y la empresa Aqua Ambient», subrayó el alcalde. Además, los técnicos reiteraron que esta entrada de aguas pluviales a la red de alcantarillado se empezó a producir con más virulencia a partir de la construcción de la trinchera de la autopista, que implicó también hacer algunas modificaciones en la red municipal.
En relación al estudio de Bartolomé Planas Marí que alerta del «grave problema crónico de salud pública, de grave contaminación de recursos naturales y de posible efecto nocivo para la fauna protegida» que suponen los vertidos, ‘Agustinet' apuntó que lo lamentaba «muchísimo», pero que, por su parte, no tienen pensado hacer análisis al respecto.
En cuanto a las posibles indemnizaciones por los cultivos perdidos a raíz de los vertidos, ha reiterado que «es muy reciente» y no podía anticipar nada. «Hay que estudiar la demanda (interpuesta por los propietarios de las fincas aceptadas hace un mes) con nuestros técnicos. Si hay una petición de responsabilidad patrimonial deberemos asumir la responsabilidad que toque».
Asimismo, Marí Ribas reconoció que conocían el problema desde hace tiempo, «pero no viene de hace dos o tres años». «Hay una demanda de los propietarios de fincas, los mismos que habían denunciado años anteriores. De momento, por lo que sé, no hay más quejas», informó. Además, puntualizó que el consistorio creía que era un problema de la conexión de aquí, que se podía solucionar. «En Abaqua nos han dicho que no es así. Habrá que ver de donde salen estas aportaciones e intentar solucionarlas para el futuro».
Desde el Ayuntamiento pidieron colaboración a los vecinos afectados para poder esclarecer las causas de los vertidos. «Puedo prometer y prometo que lo miraremos porque me preocupa y nos compete a todos», reiteró el alcalde quien dijo: «no se nos caen los anillos a la hora de asumir nuestra responsabilidad».
De momento, Sant Josep está revisando las arquetas y los pozos de la zona y abrirá de forma «inminente» una investigación sobre los vertidos irregulares de aguas de lluvia en la red de alcantarillado.