Este sábado por la noche Ibiza Magic Club, el espacio que tiene el conocido ilusionista Lucas Di Giacomo en el kilómetro 4.5 de la carretera del aeropuerto, acogerá a las 21.30 horas una gran fiesta para recaudar fondos para la delegación en las Pitiusas de la Fundación Conciencia.
El evento ha sido organizado por Alba Pau, dueña del restaurante Can Pau y colaboradora habitual en toda causa benéfica en la que los niños más necesitados estén por medio, junto al vicepresidente de la Plataforma Sociosanitaria Antonio Sánchez, Antonia Ramón, Rosana Marí y el propio Di Giacomo.
Está cerrado solo a 60 personas, consistirá en un concierto de jazz, un show de magia y una degustación de cocina española, y las entradas ya están todas vendidas. Según sus organizadores, a día de hoy ya se han recaudado unos 10.000 euros, «ya que muchas familias ibicencas han donado para la fila cero», y este dinero, sumado a lo que se logre en la subasta de un cuadro donado a la propia Alba Pau por parte de la familia del conocido pintor ibicenco Ferrer Guasch, irá destinado de forma íntegra a la delegación de la fundación que coordinan Marisina Marí y Amanda Pi.
Según Alba Pau es la primera vez que en Ibiza se hace algo parecido y en la iniciativa todos han participado de forma destinteresada, desde el diseñador de los carteles a los aparcacoches o el equipo de producción que forma parte del show. «Cuando vino a verme Marisina para ver si les podía ayudar porque estaban pasando un mal momento económico me acordé que Lucas Di Giacomo siempre se había ofrecido a colaborar en causas benéficas y pensé que podría ser un buen momento para que la magia ayudara a una asociación sin animo de lucro que lucha para que los niños y adolescentes víctimas de abusos sexuales y violaciones tengan la visibilidad y el apoyo que necesitan», aseguró ayer Pau a Periódico de Ibiza y Formentera mientras recordó una frase que siempre dice el expropietario de Pacha, Ricardo Urgell: «La ilusión mueve el mundo».
Contra el abuso y las violaciones en la infancia
Según explicó su presidenta Marisina Marí, la Fundación Conciencia es una asociación sin ánimo de lucro que lleva trabajando desde hace diez años en las Pitiusas, Baleares y España «para crear conciencia y actuar en conciencia sobre temas que están de actualidad». Amanda Pi se encarga de la parte medioambiental y Marisina de la social donde intentan «que la sociedad tome conciencia sobre lo necesario que es dar visibilidad y combatir la violencia contra los niños y los adolescentes».
Actualmente, la delegación en Ibiza trabaja sobre todo en temas de abusos, explotación y agresiones sexuales en la infancia y la adolescencia. En este sentido, Marí hizo hincapié en datos extraídos del estudio Ojos que no quieren ver de Save the children que ponen los pelos de punta. «Los distintos estudios que se han hecho en España han demostrado que entre un 10 y un 20% de la población en España ha sufrido algún tipo de abusos sexuales durante su infancia provocando en la mayoría de los casos efectos que pueden provocar síntomas clínicos relevantes».
A pesar de ello muchos abusadores siguen viviendo tranquilamente en sus lugares de trabajo, sus casas o en sus barrios. Todo son complicaciones que benefician al agresor. Según la presidenta de Fundación Conciencia en las Pitiusas, «nadie quiere creer, efectuar las pertinentes denuncias es muy complicado, no hay protocolos de detección adecuados, cuando se juzga la violación ésta suele haber prescrito en el tiempo sin haber tenido en cuenta a la víctima y cuando hay un juicio éste suele ser muy doloroso para los niños, teniendo éstos que repetir muchas veces los testimonios, contaminándose hasta el punto de perder validez legal».
Por ello, Marisina Marí confirmó a Periódico de Ibiza y Formentera que «es fundamental denunciar una violación o un abuso sexual sin miedo». Desgraciadamente, según el estudio de Save the children «únicamente sólo un 15% de los colegios en los que el niño ha contado que ha sido víctima de un abuso sexual, lo han comunicado a las autoridades».
Además, aboga por una prevención «que pasa por formación, formación y más formación» y para eso es más que necesario un especialista que vaya por los institutos y los colegios, «educándoles e identificando a los que puedan ser potenciales víctimas para que la situación se alargue en el tiempo». Una persona que saldrá del dinero recaudado en la fiesta de este sábado.