El PSOE ha incluido in extremis dos enmiendas en la ley de Capitalidad de Vila para prohibir el tráfico regular en el puerto de Sant Antoni. La primera de estas propuestas, presentadas ayer por el diputado socialista Xico Tarrés, añade como disposición adicional que la actividad comercial del puerto de Sant Antoni «no puede suponer el tráfico de mercancías ni de vehículos de cuatro o más ruedas. En consecuencia, la entrada de mercancías y de vehículos de cuatro o más ruedas en la isla de Ibiza se debe llevar a cabo a través del puerto de Ibiza». En otras palabras, esta enmienda establece que únicamente pueden entrar mercancías por el puerto de Ibiza, que cabe recordar que es de interés general (lo gestiona el Estado), mientras que el de Sant Antoni es de interés autonómico (lo gestiona el Govern).
Esta enmienda añade, además, que el plan director sectorial de transporte de Balears, que se aprobó mediante decreto en 2006, se debe «modificar para dar cumplimiento» a la prohibición de entrada de mercancías y vehículos por el puerto de Sant Antoni. A esto se agrega que lo dispuesto en esta enmienda se debe tener en cuenta, según el texto presentado ayer por los socialistas, que la prohibición del tráfico de mercancías y vehículos de cuatro o más ruedas en el puerto de Sant Antoni tiene que reflejarse en la elaboración del plan de uso y gestión del puerto portmanyí, que se tiene que redactar.
La segunda enmienda hace referencia a la modificación del artículo 14.1.b) de la Ley de Transporte Marítimo de Balears (ley 11/2010 del 2 de noviembre) para que «el interés estratégico [del puerto de Sant Antoni] se limite exclusivamente al tráfico de personas y quedan excluidos los de mercancías y los vehículos de cuatro o más ruedas».
Sobre por qué se incluyeron ayer en el último momento estas dos enmiendas, Tarrés recordó que la ley que prohibía el tráfico de mercancías y coches en el puerto de Sant Antoni se retiró del Parlament «con el ánimo de consensuar». Días después, «hubo una reunión entre Cires y Pepe Sala y me hicieron saber que se habían puesto de acuerdo y que yo lo hablara con el PP en el Parlament, lo hablé con el PP y me dijeron que ya me dirían cosas y, en un momento determinado, desde la Conselleria me dijeron que ya no quedaba tiempo para presentar la ley porque los plazos son los que son». Más tarde, le dijeron «que habían comentado con el alcalde de Ibiza la posibilidad de presentar enmiendas a la Ley de Capitalidad para el puerto de Sant Antoni porque el interés del Ayuntamiento de Sant Antoni es que esté listo este verano».
En paralelo, según explicó Tarrés, se habló con la Conselleria de Territori del Govern y Ports de les Illes Balears y esta determinó que se podía hacer una suspensión temporal del tráfico de mercancías y vehículos para que así esté prohibido este verano y el que viene. El consejo de Ports de les Illes Balears se reunió ayer y el encuentro acabó pasadas las 14.00 horas, por lo que Tarrés presentó las enmiendas a la ley de Capitalidad de Vila antes de que se acabara el plazo y «a modo preventivo».
Suspensión temporal
Finalmente, Ports de les Illes Balears aprobó ayer la suspensión temporal e irá al Consell de Govern de la semana que viene. «Ports ha aprobado esto a la espera de que lo ratifique el Consell de Govern de la semana que viene y, en el momento en que lo ratifiquen, se retirarán las enmiendas de la ley de Capitalidad de Vila», precisó Tarrés, quien recordó que esta ley se debatirá en el último pleno de la legislatura.
Por su parte, desde el Ayuntamiento de Sant Antoni celebraron esta suspensión «temporal» del atraque de transporte regular en el puerto. «Se ha aprobado lo que ya se había aprobado en el Consistorio con el consenso de todos los partidos», matizó el alcalde Pep Tur Cires. Desmintió así las palabras del PP que acusa al equipo de gobierno de aprobar la suspensión «a puerta cerrada».
De momento, esta decisión impedirá la entrada de mercancías y vehículos de cuatro ruedas durante dos años, pero «hasta que no se haga un plan de usos del plan director de Ports de Balears no se definirán las actividades y usos del puerto», reiteró el primer edil.
Lo que sí que se sabe es que las compañías navieras no han programado viajes para este verano; un hecho que para Cires dejará de causar «perjuicios» en el puerto, como colapso de tráfico, aguas sucias u olas. «La intención es que se quede así. Lo llamamos puerto, pero en realidad es la bahía turística de Sant Antoni y tenemos que recuperar su uso turístico, recreativo y pesquero», subrayó el alcalde.
En cuanto a la pregunta de si considera que la mayor parte del municipio está de acuerdo con este cierre temporal, Cires se limitó a decir que «siempre hay opiniones diferentes y en estos años conoceremos las ventajas y desventajas». Asimismo, quiso dejar claro que su cargo como presidente del Club Náutico no tiene nada que ver con la decisión de cerrar el puerto a mercancías y vehículos. «El Club Náutico es una entidad sin ánimo de lucro donde todos los directivos colaboramos sin ganar nada. Tenemos una concesión hecha por Ports de Balears que está perfectamente definida y que no tiene nada que ver con la gestión del puerto», concluyó.