La Asociación Animalista de Balears (Assaib) ha querido mostrar su «rabia» e «indignación» ante la nueva posibilidad que se le ha planteado al Consell d'Eivissa para mantener a cinco cabras en el islote de es Vedrà. Según explicó su delegada Andrea Manzano, la noticia es «muy positiva», pero «llevamos tres años entre juzgados y abogados y, ahora, quieren hacer las cosas bien de cara a las elecciones».
A su juicio, es una «contradicción» que tanto el Consell como el Govern balear se escudaran en «varios informes» que decían que había que erradicar a todos los ejemplares por el bien de la flora del islote y, ahora, un estudio de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) proponga dejar a una pequeña población caprina controlada. «Tienen estudios que decían que no podía haber cabras y ahora se puede tener a unas cuantas. Siento vergüenza al tener que leer que ahora no hay problema y antes sí», criticó.
De hecho, Manzano recordó que Joan Rita, un botánico de prestigio, dijo en diciembre que «es imprescindible la total erradicación de los herbívoros para garantizar la conservación de la flora».
Para Assaib, los cambios de opinión de las instituciones están costando dinero a los ciudadanos. «¿Cuántos informes se han pagado? Nos está costando dinero por no hacer las cosas bien desde el principio», reiteró la delegada de la Asociación. Un dato que desde el Consell d'Eivissa, dijeron, es competencia del Govern. «Nosotros no hemos intervenido nunca», expresaron.
En cuanto al estudio de la UAB, desde el Consell especificaron que, de momento, «no se ha contratado nada», ya que se están haciendo diferentes consultas en cuanto a presupuestos de informes y propuestas. «No hay ninguna decisión tomada», al igual que tampoco hay plazos fijados ya que «es muy difícil ponerlos a una cosa así; seguimos trabajando en ello».
Por su parte, el Govern -quien decidirá qué pasará finalmente con las cabras- señaló que están «a la espera de recibir oficialmente la carta (del Consell), que esperamos que vaya acompañada por los avales técnicos de ganadería que se exigieron».
Sin respuesta del Consell
Por otra parte, Manzano explicó que hace unas semanas se reunieron con Gonzalo Juan, conseller de Medi Ambient, quien les dijo que habían pedido presupuesto a tres empresas para ver la «viabilidad» de acceder a es Vedrà para sacar a las cabras con vida. «Nosotros pedimos por escrito ir con estas empresas y con los técnicos de Medi Ambient y, a día de hoy, no nos han contestado», matizó. Así, volverán a pedirlo por escrito esta semana.
«Yo, con mi nombre y apellidos, he denunciado al Govern. Creo que soy parte implicada. ¿Qué menos que me contesten? Como no entren políticos a las instituciones que sean 100% insulares, no hay nada que hacer porque siempre barren para Mallorca y no miran por la isla», espetó.
Propuestas anteriores
El estudio de la UAB propone dos maneras de sacar las cabras vivas de es Vedrà. La primera, consiste en capturar a todos los animales residentes, dejar una población de cinco en el islote que estén «inmunocastrados y trasladar el resto para que sean animales controlados». La segunda, pasa por la extracción total de todos los ejemplares.
La captura de los animales se llevaría a cabo con la instalación de un vallado y un embarcadero para descargar los materiales, además de ser un punto de carga para cuando se hayan de transportar los animales. La captura, según determinan los expertos, sería adecuada hacerla durante los meses de calor ya que «no habrá puntos de agua por el islote y deberán recurrir al agua proporcionada dentro del vallado». En el interior del vallado se les debería proporcionar comida y agua durante al menos tres semanas y, una vez comprobado que los animales entran y salen con completa tranquilidad, se debería activar la puerta para dejarlos dentro, se extrae del estudio.
Para Assaib, esta opción ya la propusieron ellos hace tiempo. «No es nada nuevo. También dijimos cómo se podía coger a las cabras y dónde se podían dejar; ahora tenemos una finca en Sant Josep y antes también la teníamos», recriminó Manzano.
Asimismo, recordó que uno de los problemas que ponían las instituciones era que las cabras no estaban sanas, pero «con un simple análisis de sangre se puede saber»; algo que también se propone en el nuevo estudio. «Además, los propietarios se han estado comiendo a las cabras desde hace años sin ningún tipo de control sanitario y nadie se ha muerto en Ibiza por eso», indicó.
De este modo, Manzano pidió que se saque «a todas» las cabras vivas porque «dejarlas allí supone más dinero y ¿quién las va a cuidar? Es ridículo. Lo hacen para tenernos ahora contentos, pero que no nos vendan la moto», concluyó.