«El caso de mi hija Vanesa es una sucesión de temeridades, desgracias y errores insoportables para cualquier familia, pero vamos a seguir luchando para que se haga justicia». Son palabras de Cati Escandell, la madre de la joven Vanesa Patricio Escandell, a la salida de los juzgados de Ibiza. Ayer acudió junto a su hija Catina, hermana de Vanesa, su yerno, José Ibarra, y el abogado de la familia, Víctor Valladares, para presentar un escrito ante el juzgado de Instrucción número 2 de Ibiza en el que solicitan la nulidad de todas las actuaciones en el procedimiento que investigó el atropello mortal de la joven ibicenca, el 9 de febrero de 2017, en un vial de la carretera del aeropuerto, en Sant Jordi.
«Tener que revivirlo todo otra vez es un maltrago pero es que a día de hoy no se ha hecho justicia con Vanesa», remarcó Cati Escandell.
La familia reclama la nulidad de todas las actuaciones y la apertura de un procedimiento penal por los delitos de falso testimonio, falsedad documental y estafa procesal, delitos presuntamente cometidos por la Policía Local de Sant Josep en la elaboración del atestado de fecha 13 de febrero.
Víctor Valladares, abogado de la familia, subrayó que todo el atestado queda anulado por el hecho de que, tal y como les ha confirmado el Consell, el punto donde ocurrieron los hechos es línea continua, no discontinua como señaló la Policía Local en su atestado. Esto conllevaría que los conductores implicados en el accidente que acabó costándole la vida a Vanesa estaban realizando unas maniobras irregulares, una conducción temeraria con resultado de homicidio imprudente.
La familia de Vanesa Patricio Escandell junto a su abagado, Victor Valladares, a su llegada al Cetis. Foto: Daniel Espinosa.
«En ese atestado se fundamentaron todas las demás pruebas emitidas por peritos de parte e incluso por el informe pericial de reconstrucción del accidente emitido por la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, pero todo queda desacreditado desde el momento en el que se dice que la línea que sobrepasó el todoterreno que acabó con la vida de Vanesa era discontinua, ya que el Consell nos han confirmado que desde 2008 en este vial hay una línea continua», recalcó el letrado Valladares.
Cúmulo de defectos
Cati Escandell hizo hincapié en que esta irregularidad es «una más de las múltiples» que han sufrido a lo largo de la investigación. En este sentido recordaron la «pérdida» de la prueba del test de drogas o la sustracción de las joyas de su hija que estaban en custodia en los juzgados de Isidor Macabich.
Momento en el que el abogado de la familia, Victor Valladares, comparece ante la TEF. Foto: Daniel Espinosa.
Recordaron que en un primer análisis los resultados dieron negativo en drogas aunque en el segundo análisis sí dieron positivo en cocaína, a pesar de que el bote que contenía las pruebas no estaba bien cerrado y la saliva se derramó por la bolsa hermética que contenía los recipientes. Añadieron que el conductor se declaró «consumidor habitual» de cocaína.
Asimismo, hizo hincapié en que la familia tampoco ha logrado recuperar los tres pendientes y el anillo que Vanesa llevaba en el momento del accidente.
La jueza del Juzgado de Instrucción número 2 de Ibiza decretó en julio pasado el archivo provisional de la causa penal para que se juzgara por lo civil. Ahora, Valladares entiende que el informe del Consell es «absolutamente claro y taxativo» y da un giro a todo el proceso.