La irrupción de Proposta per Eivissa (PxE) será clave a la hora de conformar gobierno en Eivissa y Sant Antoni (con dos y un edil respectivamente), donde el Partido Popular, a pesar de sumar más votos que los socialistas, necesitan de un tripartito para gobernar.
En este sentido, Toni Roldán, concejal electo, calificó de «estupendos» los resultados del 26M aunque reconoció que ya se los esperaban. «Sabíamos que podíamos estar entre uno y tres concejales y ahí estamos», matizó al tiempo que dijo que «lo que no nos esperábamos es que fuésemos decisivos».
Ante este nuevo escenario, Roldán indicó que su partido no tiene líneas rojas y reiteró que lo ocurrido en 2012 con el Partido Socialista no fue con la formación en sí, sino con personas concretas. «El PSOE, como partido, no tiene nada que ver; una cosa es mirar por el interés general de los ciudadanos ibicencos y, otra, mis problemas con determinadas personas que había dentro del PSOE», subrayó. «Yo ahora no estoy para personalismos», añadió.
Aún así, Roldán no ve claro un posible acuerdo con la izquierda. «El problema no es si yo quiero o no quiero. Por lo que estoy leyendo y oyendo por ahí, son ellos los que no quieren. Si quieren gobernar, tendrán que dar los pasos necesarios para hacerlo; eso no quiere decir que lleguen a un acuerdo conmigo». Por ello, insistió en que la iniciativa a la hora de empezar las negociaciones la tiene que tener tanto el PP como el PSOE.
El edil electo de PxE también reconoció que era de esperar que los populares superaran en votos a los socialistas porque «Marí Bosó era mejor candidato que Rafa Ruiz. Esto no lo digo yo, lo dice la gente que estaba muy enfadada con él; los motivos, él sabrá».
Sant Antoni
Por su parte, Joan Torres, edil electo de la formación en Sant Antoni, no pudo contener su satisfacción a pesar de la pérdida de votos. Y es que, cabe recordar, que el PI consiguió tres concejales en 2015 que se han reducido a uno en estas elecciones. «Si hay algo bueno es que mantenemos influencia en cuanto a formar gobierno; somos la llave como en 2015», indicó.
Sin embargo, en un intento de hacer autocrítica, Torres reconoció que «no hemos sabido recoger los frutos del tripartito de 2015», aunque ligó el nuevo escenario a «lo que ha pasado con la tránsfuga Cristina Ribas, que ha hecho que los ciudadanos quieran los menos líos posibles». También acusó la caída de votos a la entrada de nuevos partidos en Sant Antoni (Ciudadanos -consiguiendo un edil-, Vox, Podemos y Epic) que han fragmentado el voto.
Lo que tiene claro Torres es que, siendo un partido moderado, «podemos pactar con la izquierda y con el centro derecha», aunque «hay una serie de actuaciones por las que decidimos salir del gobierno a finales de enero».
De momento, la coalición Proposta per Eivissa (formada por Más Eivissa, Alternativa Insular y el PI) se reunirá en el día de hoy para decidir qué decisiones se toman y qué estrategia siguen. «La política de pactos la decidiremos entre todos, pero mirándolo todo bien con lupa», recalcó Torres.
Ojalá con la salida de Cires y la llegada de Marcos Serra se recupere la llegada de ferrys a San Antonio, por mucho que le pueda doler al presidente del club náutico. No tiene sentido apostar por la desestacionalización del turismo, si luego impedimos a los turistas llegar a Ibiza. Porque la mayoría de la gente que llega en barco son familias que vienen a pasar varios días a la isla, no turismo cutre como el del West End.