La historia se repite en la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) de Ibiza y es que, en lo que queda de año, solo hay disponibles cuatro fechas en el mes de octubre (los días 15, 16, 17 y 18), teniendo dos de ellos alta ocupación.
En este sentido, desde el Consell d'Eivissa explicaron que cada semana se abren nuevas fechas, aunque reconocieron que, a día de hoy, la espera ronda los cuatro meses.
Asimismo, indicaron que ya se han incorporado dos mecánicos nuevos y, en las próximas semanas, se tienen que incorporar cuatro más gracias a la ampliación de plantilla que se aprobó para este 2019. «Primero tienen que hacer un periodo de formación. Cuando lo hayan completado, y a medida que se vayan incorporando los siguientes, la lista de espera bajará enormemente en cuestión de pocos meses», subrayaron desde la institución.
Segunda ITV
Por otra parte, el Consell confirmó que, al estar aprobada la modificación del Plan Territorial Insular (PTI), ya hay vía libre para la instalación de una nueva ITV en la isla. «Este era el primer obstáculo y la modificación ya está aprobada», matizaron. Se trata, de este modo, de un proyecto que se tendrá que abordar en esta nueva legislatura.
Cabe recordar que con la eliminación de la norma 52 del PTI, que establecía que la superficie mínima de la parcela vinculada íntegramente a tal uso tenía que ser de 15.000 m2 y la superficie mínima construida de las instalaciones de 2.000 m2, ya es viable tener otra ITV en Ibiza.
Aunque este cambio sigue evitando que se pueda ubicar en suelo rústico (salvo poder ampliar la existente ITV propiedad del Consell), ya no se exige que las nuevas ITVs estén en unas parcelas de suelo urbano o urbanizable de uso industrial con una superficie mínima de suelo necesario. Eso sí, este tipo de instalaciones deben cumplir con la normativa urbanística aplicable a la parcela donde se quieran implantar.
Por otro lado, según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), el parque móvil de la isla ha pasado de los 139.957 vehículos en 2014 a los más de 160.000 actuales, lo que supone un incremento de 20.000 vehículos en cuatro años; un aumento que, junto con la antigüedad de los vehículos, hace que tengan que pasar la revisión cada año y, por ello, desde el Consell justificaron así la necesidad de tener una nueva ITV.