La empresa Acciona retomará las obras de rehabilitación del Parador de Ibiza después de ocho años paradas. Los trabajos se pararon en el año 2011 por unos hallazgos arqueológicos que Vila y Consell d'Eivissa determinaron que había que proteger dada su importancia patrimonial. El Consejo de Ministros autorizó el pasado 26 de abril a Turespaña la contratación por 21,1 millones de euros de las obras del Parador, que finalmente ha adjudicado provisionalmente a Acciona tras presentarse varias empresas al proceso de licitación. Acciona tiene dos meses para presentar la documentación requerida para aprobar la adjudicación definitiva. La obra costará 21,1 millones de euros.
Accesibilidad al patrimonio
El alcalde de Vila, Rafa Ruiz, explicó ayer que después de muchos años de idas y venidas y de explicaciones difíciles de entender para la ciudadanía, «el parador parado, ya no está parado». En este sentido apuntó que «es una manera de hacer hostelería diferente y que para Dalt Vila será dinamizador. La idea es mejorar también la accesibilidad para que turistas y residentes visiten con más frecuencia el patrimonio, por lo que se pondrá un ascensor para subir hasta el parador».
El presidente del Consell d'Eivissa, Vicent Marí, afirmó que los ibicencos estaban de enhorabuena ya que tanto, desde el punto de vista turístico como patrimonial, reanudar las obras supone recuperar un barrio histórico como Dalt Vila y que se pueda disfrutar de un entorno tan maravilloso declarado Patrimonio de la Humanidad. Señaló también que espera que las obras finalicen en su plazo previsto.
El futuro Parador de Ibiza contará con 72 habitaciones distribuidas en el conjunto de edificaciones que conforman el recinto del castillo y la Almudaina, incorporará un centro de interpretación, una piscina exterior con solárium, una sala multifuncional y un aparcamiento subterráneo de 40 plazas, entre otros servicios.