Las celebraciones del Tots Sants, más tradicional, y Halloween, importada desde Estados Unidos conviven durante estos días en la isla de Ibiza. Sin embargo, a pesar de que haya partidarios de unos y de otros lo que está claro es que las dos son casi exclusivamente, cosa de niños, por más que luego por la noche haya fiestas en prácticamente todos los sitios que quedan abiertos.
Donde se puede ver la convivencia entre ambas es en los colegios. La mayoría de ellos organizan un día festivo en el que se busca, sobre todo que no se pierda la tradición ibicenca. Es el caso, por ejemplo, del colegio Guillem de Montgrí, de Sant Antoni, donde todos los años se rinde tributo a la historia y gastronomía ibicenca con talleres en los que se enseña a los más pequeños de la familia a realizar panellets o bunyols gracias a la colaboración de los alumnos del Ciclo Formativo de Panadería, Repostería y Confitería del Instituto Sa Serra. Sin embargo, allí, la elaboración no ha sido lo más difícil sino el probarlos porque ya a primera hora estaban todos los bollos resevados.
Además, aquí se mezcla la tradicional trencada de pinyons con una fiesta de Halloween que se celebró por la tarde y que incluía todo tipo de cosas para pasar una jornada terrorífica, entre ellos una gran merienda y un concurso de disfraces.
Otro colegio que también celebró su fiesta fue Sa Jovería, en Ibiza. En su Festa de Tardor hubo recetas tradicionales hechas por los propios alumnos, trencada de pinyons y hasta una castañera. Y todo ello, unidos grandes y pequeños, trabajando dentro del programa de padrinos y ahijados.
Fiestas por la tarde
Mientras, el SOIB en Santa Eulària organizó en la céntrica Plaza del Cañón de la localidad talleres de Halloween y Tots Sants dentro de su programa Santa Eulalia con los niños y las niñas III. De 17.30 a 20.30 horas los niños disfrutaron con talleres de tradiciones del día de los difuntos, La momia Tururú, el fantasmito, la araña enredada o la calabaza Azabalac. Y todo ello de modo totalmente gratuito.
Otro lugar donde hubo fiesta fue Jesús, En su centro cultural se instaló un sorprendente túnel del terror gracias a la gestión de la Comisión de Fiestas de Jesús y el Ayuntamiento de Santa Eulària. Previo pago de 1 euros, en su interior los asistentes se encontraron con muchas sorpresas y también las criaturas más espeluznantes.
Sant Rafel también se sumó a las celebraciones de Halloween por la tarde. En este caso el maestro de ceremonias fue en la carpa instalada para la ocasión el Mago Albert y sus divertidos juegos y los organizadores los miembros de la APIMA del colegio de la localidad.
Y otros padres de alumnos que aportaron su granito de arena para que los pequeños se divitieran con Halloween fueron los del colegio de Santa Gertrudis. En este caso hubo una gran fiesta familiar a partir de las 17.00 horas en el parque infantil de la localidad y todo lo recaudado con los pasteles, y la inscripción para los pintacaras y otras actividades muy divertidas se destinó para el viaje de fin de curso de sus estudiantes. Incluso, hubo concurso de disfraces.