Ibiza y Formentera recibieron en los nueve primeros meses de este año un total de 2.827.382 turistas, lo que representa un descenso del 1,82% en comparación con el mismo periodo del año pasado. En términos absolutos, las Pitiusas han perdido 52.000 visitantes, según las cifras que hizo públicas ayer la encuesta Frontur que elabora el Gobierno y que en Balears difunde el Ibestat.
Esta encuesta revela, además, que el mayor descenso se registró en el turismo nacional, que disminuyó un 6% en los nueve primeros meses del año hasta los 553.358 visitantes españoles. Por contra, el turismo extranjero se mantiene prácticamente invariable con una ligera caída del 0,71%. Dentro de éste, la fortaleza del mercado británico continúa, pues entre enero y septiembre de este año un total de 761.507 británicos escogieron Ibiza y Formentera para sus vacaciones, lo que representa un 0,40% más que en 2018.
En cuanto sólo al mes de septiembre, esta encuesta no refleja el dato aislado de ese mes en el caso del mercado británico. Cabe recordar que las principales patronales turísticas esperaban cierta incidencia en los números de final de temporada tras la quiebra de Thomas Cook, si bien es cierto que ésta se produjo a finales de septiembre y que, por tanto, la influencia deberá reflejarse en los resultados de octubre y final de temporada. El resto de mercados extranjeros que salen reflejados en esta encuesta registran caídas. Es el caso del mercado francés, que en los nueve primeros meses del año experimentó un descenso del 13%, mientras que el alemán cayó un 0,23% en comparación con 2018 hasta los 245.521 visitantes de esta nacionalidad. De los países bajos, únicamente llegaron 310.762 visitantes, un 5,76% menos que hace un año.
Caída del gasto
En paralelo al descenso de turistas se encuentra la caída de su gasto. Entre enero y septiembre de este año, el gasto turístico se ha situado en 2.800 millones de euros, un 2,09% menos que el año pasado. Cada turista invirtió en sus vacaciones en Ibiza un total de 993,62 euros, tres euros menos que el año pasado, y la estancia media se situó en 6,6 días. El gasto diario se situó en 167,05 por persona y día, lo que significa casi cinco euros menos que el año pasado.