FOTOGALERÍA | El desembarco militar en Ibiza, en imágenes
Platja d'en Bossa. Faltan diez minutos para las 10.00 horas, la hora H del día D. En el horizonte, la imponente silueta del portaaeronaves ‘Juan Carlos I', el buque insignia de la Armada española. El zumbido y las pasadas del helicóptero Hughes 500 avanzan lo que se avecina. En la arena cerca de un millar de personas, la mayoría jóvenes escolares de la isla pero también muchos vecinos, turistas y algún corredor matutino, toman posiciones para presenciar el desembarco. Por delante 35 minutos de acción que fueron recompensados con más de media hora de muestras de reconocimiento, ánimos y centenares de peticiones de autógrafos que hicieron soltar alguna lágrima de emoción a varios efectivos de la Infantería de Marina que ayer tomaron de forma ficticia Platja d'en Bossa. En el ejercicio desplegado por la Armada española también intervino una unidad de los US Marines de la base de Morón de la Frontera. «Ha sido una pasada. Parecía una película, nunca había visto nada igual», señaló Andrea González, alumna de sa Real. Para Hugo Llobera, del CEIP Vènda d'Arabí, lo más impactante fueron los helicópteros: «Han llegado a la playa y algunos de ellos han saltado al mar desde el aire», en referencia a los cuatro nadadores que se lanzaron desde un AB212, los denominados ‘Gatos'.
El desembarco desplegó a cerca de un centenar de efectivos de la Infantería de Marina, cuatro helicópteros y una decena de embarcaciones. Finalmente, la meteorología dio una tregua y todo se desarrolló según lo previsto en el Día D y la hora H. Los momentos más aplaudidos, el descenso rápido -Fast rope- protagonizado por ocho efectivos que se descolgaron desde un helicóptero SH3D, los conocidos como ‘Morsas', o la entrada de los dos anfibios AAV lanzando una cortina de humo. Minutos antes habían tomado tierra los fusileros que desembarcaron desde las lanchas ‘Súpercats'. Siguiendo el ciclo de ‘Olas' el ejercicio se culminó con el desembarco de los vehículos pesados que trasladaron las cuatros lanchas de desembarco LCM, de donde bajaron los vehículos ‘Piranha'.
Presidiendo el ejercicio práctico, el Comandante General de la Infantería de Marina, el ibicenco Antonio Planells Palau, y el presidente del Consell de Eivissa, Vicent Marí, junto a numerosas autoridades locales de la isla.
Foto: Daniel Espinosa.
Cuando el brigada Rosselló, relator del ejercicio práctico, dio por finalizado el desembarco, la Polícia Militar abrió el perímetro de seguridad para mayor júbilo de los asistentes.
Los escolares echaron mano de libretas y hojas para solicitar autógrafos a los participantes en el desembarco, que atendieron las peticiones para realizarse fotografías, mientras otros compañeros facilitaban el acceso del público a los vehículos y respondían a sus preguntas.
El desembarco desde dentro
La hora H marca el desembarco, pero la jornada para la OMP, el Grupo de Apoyo Logístico en Combate, arrancó a las 06.00 horas en las entrañas del Juan Carlos I. Periódico de Ibiza y Formentera acompañó y desembarcó junto a la unidad de 33 efectivos. La operación arrancó con la carga de dos vehículos pesados, un camión y un buldócer de 22 toneladas de peso en una lancha de desembarco LCM. Los infantes iban pertrechados con sus equipos autónomos y sus fusiles de asalto HK.
Foto: Daniel Espinosa.
Minutos antes de las 07.00 horas, el Juan Carlos I abría la compuerta de su dique inundable con capacidad para cuatro embarcaciones LCM. Las condiciones meteorológicas habían mejorado considerablemente y minutos después la lancha de desembarco salía a mar abierto y ponía rumbo a Platja d'en Bossa con las primeras luces del día. Apenas media hora después, la compuerta de la lancha de desembarco tocaba la arena de Ibiza. La OMP señalizaba la zona y desplegaba su equipo de comunicaciones. Empezaba la cuenta atrás para un ejercicio de desembarco que cautivó a cerca de un millar de personas en Platja d'en Bossa.