Queso de cabra, sin conservantes, hecho de cuajo vegetal y elaborado artesanalmente. Este es el producto final que ofrecen Fina Prats y Pilar González en su explotación llamada Ses Cabretes, una granja con 125 cabezas de ganado que está ubicada en las proximidades de Sant Antoni.
De momento, son ellas dos quienes se encargan del cuidado de las cabras, su alimentación, el ordeñado y la elaboración del queso, aunque los fines de semana han de contar con algún ayudante para poder tener un respiro.
Y es que las jornadas empiezan desde bien temprano con el ordeñado diario de las cabras de 06.00 a 09.00 horas. «Las cabras dan mucho trabajo y problemas. Siempre estamos preocupadas por ellas», cuenta Pilar.
Queso al estilo payés
«Nuestro queso es completamente artesanal y hemos intentado que se parezca al máximo al que se elaboraba en las casas payesas. Las variedades que vendemos son las de tierno, curado y semicurado. La diferencia es que trabajamos con una humedad y temperatura estable», explica Fina Prats.
Pilar añade que ahora los quesos les salen más «homogéneos» porque tienen los procesos muy estandarizados, pero «siguen siendo quesos muy artesanales y, al igual que los de las casas payesas, nunca nos salen iguales». «La receta es prácticamente igual a la del queso que se elaboraba antiguamente, se sala de la misma manera y la temperatura de la cámara es similar al lugar donde se secaban los quesos en las casas», expuso.
Pilar y Fina empezaron la elaboración de quesos en 2014 y, en la actualidad, venden queso en 15 establecimientos de Vila y Sant Antoni, además de proveer de producto a algunos restaurantes de la zona. En este caso, Pilar apunta que su límite no es la venta, sino la producción primaria de leche con la que elaborar el queso.
Este proyecto ha contado con la colaboración del Consell d'Eivissa y el apoyo de fondos Leader. Este sábado concluyeron las jornadas gastronómicas de otoño, impulsadas por el Consell y Pimeef, con una visita a su granja y una demostración de la elaboración de su queso.