La isla comenzó a recobrar la normalidad ayer con el regreso de algunas de las actividades no esenciales que habían sido suspendidas el pasado día 31 de marzo mediante el Real Decreto 11/2020, entre las cuales cabe citar la construcción y la industria.
Sin embargo, continúa habiendo problemas en el suministro de productos de higiene tales como mascarillas, guantes y alcohol y, en menor medida, geles, al menos, en farmacias como la de Vara de Rey y la de la Avinguda d'Ignasi Wallis. En este sentido, en la cadena Ser, el presidente de la Petita i Mitjana Empresa d'Eivissa i Formentera (Pimeef), Alfonso Rojo, dijo que lo más adecuado habría sido esperar otros 15 días, pero que algunas empresas no podrían haber hecho frente a dos semanas más de permiso retribuido.
Rojo señaló que una de las razones por las que apostaron por un cese de actividad fue precisamente la falta de equipos de protección para los trabajadores. Además, dijo no entender por qué las 32.000 mascarillas que el Gobierno ha dado a las Pitiusas se concentren en el transporte público, que es usado por una minoría para ir al trabajo. En su opinión, deberían haberse buscado otros canales de reparto porque, además, «se ha pedido a los trabajadores que se desplacen andando, en bicicleta o con su vehículo». Además, Rojo apuntó que las empresas tienen stock para aguantar un poco, pero advirtió de que a partir de la próxima semana se necesitará más material «porque sólo hay mascarillas para trabajar cuatro días».
El presidente de la patronal dijo que el sentir mayoritario de las empresas de construcción, fontanería, electricidad o pintura es el de mantener el parón, pero recalcó que, económicamente, es totalmente inviable porque, además, no está claro cuando se podrán recuperar las horas no trabajadas de sus empleados. «De hecho, ya se está hablando de que se tendrán que recuperar en 2021», aseguró.
Rojo afirmó que están trabajando para disponer de más material de protección cuando abra el resto del tejido comercial porque así lo han pedido algunas asociaciones, pero se están encontrando, según dijo, «un auténtico mercado de la especulación y con productos no siempre homologados».
UGT apela a la conciencia de los empresarios
UGT apeló ayer a la «conciencia» de los responsables de las empresas para que eviten reanudar la actividad si no pueden garantizar de «manera plena» la salud y seguridad de las plantillas en su vuelta al trabajo. Con la reanudación ayer de los trabajos definidos como no esenciales, UGT recordó que en Balears es obligatorio el uso de mascarillas de «mayor protección» si no se pueden respetar los dos metros de seguridad recomendados para evitar los contagios por coronavirus, como en la construcción. El sindicato insistió en que, aunque las administraciones estén repartiendo mascarillas, son las empresas las que tienen la obligación de proporcionar los equipos de protección.
En edificios vacíos
También desde Pimeef, la presidenta de la Asociación de Constructores de Ibiza, Consuelo Antúnez, aseguró ayer que la jornada había transcurrido con relativa normalidad en lo que a las obras se refiere, teniendo en cuenta que, según la Orden SND/340/2020, de 12 de abril, «se establece la suspensión de toda clase de obra que suponga una intervención en edificios existentes, en los supuestos en los que en el inmueble en el que deban ejecutarse se hallen personas no relacionadas con la actividad de ejecución de la obra» .
En cuanto a las medidas de seguridad, eso sí, Antúnez reconoció que no contaban con suficientes mascarillas de protección para los trabajadores, por lo que lo que estaban haciendo era, sobre todo, mantener las distancias y distribuir las tareas para así evitar contagios. Además, aseguró que las instrucciones son que, para ir a trabajar, haya un máximo de dos personas por coche, en su caso sentados en diagonal para mantener las distancias en la medida de lo posible. De hecho, Antúnez opinó que, siempre que se respete este punto, las mascarillas no son necesarias.
Formentera retrasa el comienzo de la actividad hasta la próxima semana
La presidenta del Consell de Fomentera, Alejandra Ferrer, decidió ayer que las obras públicas como la Residencia de Mayores o la Avinguda Joan Castelló i Guasch de Sant Ferran «no empezarán hasta la semana que viene, cuando se pueda garantizar la seguridad al cien por cien», porque, después de haber hablado con las diferentes empresas, se consideró que no estaban en disposición de empezar. la actividad. «La semana que viene se estudiarán estos protocolos para comprobar que todas las empresas cumplen con las medidas de seguridad», agregó Ferrer.
Desde la Asociación de Constructores de Balears, su vicepresidente primero, Óscar Carreras, se manifestó a favor del inicio de la actividad en los sectores autorizados, pero pidió ayuda a las administraciones a la hora de proporcionar los correspondientes EPIS.
En las obras visitadas ayer por Periódico de Ibiza y Formentera en el centro de la ciudad de Ibiza, Platja d'en Bossa y Santa Eulària des Riu, la mayoría de los obreros estaba usando la mascarilla y los guantes.