«Quiero incidir en la importancia, ahora más que nunca, de la prudencia y la responsabilidad individual de cada uno. Mientras estábamos confinados era más fácil controlar los movimientos. Ahora, este control depende de nosotros mismos y de la capacidad de actuar con sentido común y saber que pasar de fase no significa que todo haya acabado. La enfermedad sigue aquí y cada pequeña acción individual tiene repercusión en todo el colectivo». Así comenzó su comparecencia Vicent Marí ayer. El presidente del Consell d'Eivissa salió para hacer balance de la primera jornada de la fase 1 en la isla en la que se abrieron pequeños comercios y las terrazas de algunos bares.
Marí insistió varias veces en la importancia de cumplir las normas sanitarias, lamentó «las pocas mascarillas» que se vieron por las calles y la «ausencia de la distancia de seguridad». Dos detalles que «pueden tirar todo el trabajo hecho hasta ahora». En este sentido, pidió un «esfuerzo» colectivo para que la gente se acostumbre a usar la mascarilla: «Debemos ser un ejemplo para otros».
En cuanto a esta primera jornada de la fase 1 en Ibiza, el presidente de la institución insular aseguró que los negocios que habían abierto sus puertas son aquellos que ya estaban en funcionamiento antes de que llegase esta pandemia de la COVID-19, es decir, negocios que viven del público local. Marí destacó que fue una jornada de «tranquilidad» en la que el número de establecimientos abiertos «no fue muy elevado».
Además, desde el Consell informaron que en esta primera jornada se repartieron 4.000 carteles informativos por los diferentes municipios de las islas. Precisamente, el presidente reconoció que uno de los principales problemas que había ayer en la calle era la falta de información sobre lo que se podía hacer en esta nueva fase, así como dudas sobre los horarios.
En cuanto a cifras, Marí habló del número de terrazas abiertas. Señaló que en Vila se contabilizaron unas 40; 12 en Sant Antoni, cinco en Santa Eulària; cinco en Sant Joan; y cuatro en Sant Josep. Además, señaló que en los próximos días el número de negocios abiertos irá creciendo.
El presidente informó de que los inspectores habían visitado de manera informativa 50 locales y que lo seguirían haciendo durante las jornadas sucesivas. Del mismo modo, aseguró que estas primeras visitas serán informativas, pero que no se permitirá «el abuso» y que la gente que reincida «será sancionada». En este sentido, pidió a los empresarios que «respeten las normas». «Esto es una carrera de fondo y nos jugamos mucho», apostilló.
ITV
Por otro lado, Marí destacó también la reapertura de la ITV, asegurando que en la primera jornada habían recibido hasta 3.000 llamadas. Explicó que en esta recuperación de la actividad hay una primera fase para recolocar a las personas que habían perdido su cita por el estado de alarma. En este sentido, informó de que en «los próximos días se espera que empiece a operar la ITV móvil» y, de este modo, descongestionar la lista de espera.
Fases y playas
En el turno de preguntas, Marí fue cuestionado por si Ibiza se planteaba solicitar abrir las playas antes de la fase 3. Éste pidió «calma y paciencia» porque «las playas seguirán estando ahí». Además, recordó que la gente puede ir a nadar y hacer deporte, lo que no está permitido «es ir a tomar el sol y tirarse en la arena».
También rechazó que Ibiza fuese a solicitar entrar antes en la fase 2: «Toca cumplir lo estipulado. Cada fase tiene un periodo de 14 días y es algo que hay que ir haciendo para evitar un rebrote». «Hemos hecho lo más duro que es estar confinados en casa. No tenemos que tener prisa», aseveró.
Test masivos
Además, volvió a hacer incidencia en una de sus demandas habituales. El Consell volvió a solicitar que se hagan test rápidos en aeropuertos y puertos: «Hay que ser ambiciosos y dar un paso más. Tenemos que saber que la gente que llega a Ibiza no viene con la enfermedad. Esto es algo que se debe hacer a nivel estatal y también europeo. Se deben adoptar unos protocolos para viajar».
Apertura de negocios
En cuanto al regreso a la actividad, las patronales destacaron que había sido una jornada sin incidencias y reconocieron que el número de negocios que habían abierto sus puertas no era muy alto, pero esperan que vaya en aumento a lo largo de los próximos días.
Desde Pimeef Restauració, Verónica Juan destacó que «la gente tenía ganas del café y la caña y ha acudido a las terrazas». La vicepresidenta fue positiva y habló de la importancia de «adaptarse a las nuevas circunstancias».
Por último, aunque reconoció que no tenía datos del número de terrazas, señaló que los primeros en abrir son «los negocios de los núcleos urbanos, los que abren también en invierno y trabajan con público de la isla». Aún así, aseguró que espera que también vayan abriendo negocios de temporada.
Por otro lado, desde la Cámara de Comercio, su presidente Carlos Marí se mostró en una línea pareja y confió en que en los próximos días vayan abriendo sus puertas más establecimientos. Reconoció que muchos negocios tenían muchas dudas sobre lo que podían hacer y lo que no y que otros están esperando a ver cómo les va a sus vecinos antes de lanzarse a abrir las puertas. Por último, desde la Cámara de Comercio lamentaron la falta de conciencia de mucha gente: «Parece que no se dan cuenta de lo que estamos viviendo. Van sin mascarillas y podemos tener un rebrote».
La plaza del Parque
Los 15 establecimientos de la Plaza del Parque permanecen cerrados. Así será, al menos, hasta mañana cuando se reunirán con el Ayuntamiento de Eivissa para analizar su petición de ampliar sus terrazas hacia el interior de la plaza. El presidente de la Asociación de Bares de la Plaza del Parque, Enrique Weckler, señaló que en función de esta reunión con el Consistorio algunos establecimientos abrirán mañana, otros el viernes y otros esperarán directamente a la fase 2 «porque para gente que tenemos empleados en el ERTE no es rentable».
Welcker aseguró que el público local no les permitirá «hacer caja» para hacer frente a unos alquileres que, en el mejor de los casos, superan «los 2.000 euros al mes». Pese a esto, señaló que «hay una necesidad imperiosa de poder facturar nuevamente».
Por último, quiso agradecer al Ayuntamiento «una ayuda muy grande» como es la de no tener que pagar las terrazas este verano». Anunció que, además, se están negociando las tasas de basura y puso su esperanza en unas ayudas para pymes «que, según dijo el alcalde, serán de un millón de euros entre el Consell y el Ayuntamiento».
EL APUNTE
La patronal pitiusa de Rent a Car y podría operar sólo al 30 %
La Asociación de Rent a Car pitiusa lamentó que, por el momento, «no ven la luz» ya que la fase 1 «no es significativa» para estas empresas que se van a quedar «prácticamente para el final». Señalaron que sus clientes son, en su mayoría, turistas; y, según calculan, esta temporada podrían trabajar «al 30 por ciento, siendo optimistas».