La apuesta de Mercadona, compañía de supermercados físicos y de venta online, por los productos frescos y de proximidad, provoca que la compañía tenga previsto comprar más de 92.000 toneladas de patatas de origen nacional para 2020, aproximadamente un 7% más que en 2019, cuando la compañía compró aproximadamente 85.500 toneladas.
Para abastecer de este producto a las tiendas de Mercadona, la compañía colabora para la campaña de este año, que va de mayo a octubre/noviembre aproximadamente, con proveedores locales cuyos campos se ubican en Andalucía, Región de Murcia, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Comunidad de Madrid, Comunidad Valenciana, La Rioja, Asturias, Euskadi, Galicia, Islas Baleares y Canarias.
En Illes Balears la compañía colabora con los proveedores Illacamp en Mallorca y Mister Chippy en Ibiza, a quienes en 2020 tiene previsto comprar 2.000 y 400 toneladas respectivamente. A partir del mes de mayo la compañía comienza a ofrecer patatas de proximidad en su sección de Fruta y Verdura, y se extiende hasta octubre o noviembre, en función de la producción. Como todos los años, durante la campaña española, entre mayo y octubre/noviembre, y cuando el producto cuenta con la calidad que demandan los ‘jefes' (clientes), hay patata 100% española procedente de diferentes comunidades autónomas.
En 2019 las compras de Mercadona en España alcanzaron un valor superior a los 19.970 millones de euros. Gracias a los acuerdos comerciales de la compañía con el sector primario, Mercadona colabora con 9.500 agricultores, 12.000 pescadores y 6.700 ganaderos. Además, la compañía apoya la iniciativa del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ‘Frutas y Verduras de temporada'.
En Mercadona el 100% de los proveedores, con los que se mantienen relaciones estables, son españoles, como Patatas Meléndez, Patatas Hijolusa, Udapa, Almacenes Lázaro, Hermanos González Arrebola, Patatas Gómez, Manuel Prado, Cadimisa, Papacan, Mister Chippy e Illacamp. Estos a su vez mantienen relaciones estables y de confianza con agricultores locales, consolidando así un Modelo de Cadena Agroalimentaria Sostenible del que la compañía se siente orgullosa de formar parte.
Asimismo, Mercadona defiende las prácticas comerciales justas y desde hace años está adherida al Código de Buenas Prácticas Mercantiles en la Contratación Alimentaria. Este acuerdo voluntario, que supone un nuevo paso en la promoción de prácticas comerciales justas, se enmarca en la Ley de Medidas para Mejorar el Funcionamiento de la Cadena Alimentaria y está impulsado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) en colaboración con distintas asociaciones de toda la cadena agroalimentaria nacional.