Los botellones y fiestas se están convirtiendo en una de las principales preocupaciones de las autoridades a la hora de contener la pandemia y los cuerpos policiales tienen que intervenir a diario. Los dos últimos ejemplos, sendos botellones que tuvieron que ser desalojados en Sant Josep y Santa Eulària la noche del miércoles.
La mayor concentración irregular se produjo en una cala de Sant Josep a la que la Policía Local tuvo que acudir al ser alertados sobre la presencia de un grupo de jóvenes bebiendo e incumpliendo las medidas de seguridad sanitarias relacionadas con la COVID-19.
La Policía Local se desplazó hasta la cala indicada y procedió a la identificación y desalojo de las personas que se encontraban en la zona tras el cierre de las playas, fijado a las 21.00 horas.
La intervención se resolvió con 13 denunciadas por realizar botellón e incumplir la prohibición de llevar a cabo reuniones sociales de más de 10 personas. Además, dos personas fueron denunciadas también por no disponer de la mascarilla obligatoria, medida de seguridad sanitaria junto a otras como el mantenimiento de la distancia de seguridad o el cierre de playas y parques de 21.00 a 07.00 horas.
Santa Eulària
En Santa Eulària, agentes de la Policía Local desmantelaron un botellón donde participaban diez jóvenes en el parque de Can Fluixà.
Según informaron fuentes municipales, la intervención se produjo alrededor de las 21.45 horas cuando una patrulla circulaba por la avenida Margarita Ankermann y advirtió la presencia de un grupo de jóvenes en el interior del parque.
Además de las sanciones por estar reunidos sin mascarilla ni distancia de seguridad, también se iniciaron sendos expedientes por el consumo de alcohol en la vía pública y por la confiscación de una pequeña cantidad de marihuana que los jóvenes habían escondido en una cajetilla de tabaco.