Vila continuará con su situación excepcional una semana más. Así lo confirmó ayer la consellera de Salut, Patricia Gómez, en una rueda de prensa en la que compareció junto a la asesora técnica de desescalada del ejecutivo balear, Margalida Frontera. Ambas señalaron que la situación del municipio sigue estando lejos de las cifras recomendadas y por ello se toma la decisión de alargar las restricciones una semana más.
Además, de manera paralela, Salut incrementará a partir de mañana las restricciones de aforos y consumo en las islas de Mallorca e Ibiza alegando que «no tomar estas medidas sería peor». Gómez presumió de ser la tercera comunidad con menor afectación de la pandemia en estos momentos, sin embargo, la incidencia sigue siendo alta. «Los casos se aceleran en nuestro entorno y de lo que hagamos ahora depende tener el control, las Islas no son ajenas a lo que ocurre en el mundo», dijo.
Gómez también mostró su preocupación por la llegada del frío y aunque aseguró que a «ningún gobernante le gusta tomar restricciones», añadió que «estas medidas convivirán con nosotros durante unos meses y las tenemos que integrar en nuestro día a día».
Así pues, desde su publicación en el BOIB prevista para mañana sábado, se reducirán las reuniones sociales y familiares de diez a seis personas (excepto en el caso de personas convivientes) siempre respetando la distancia de seguridad y con el uso de la mascarilla.
Queda prohibido el uso de las barras en todos los establecimientos de restauración y el número máximo de personas por cada mesa será de seis. Asimismo, se recomienda no realizar celebraciones sociales en el ámbito laboral, especialmente si van acompañadas del consumo de alimentos o bebidas.
El aforo de los espacios comunes de los centros comerciales se reduce al 50 % y en los comercios se prohibe la venta de alcohol a partir de las 22.00 horas. Es obligatorio que figure el aforo máximo del local en número de personas en la entrada de los establecimientos comerciales y de restauración.
En cuanto a la actividad deportiva, se reduce al 30 % el aforo máximo en las salas de musculación, salas para actividades dirigidas de las instalaciones deportivas y de los vestuarios. Por otra parte, las actividades grupales dirigidas en estos espacios cerrados no podrán superar las 15 personas.
Además, el aforo máximo en los lugares de culto será del 30 % donde se recomienda no cantar.
Por último, las celebraciones nupciales u otras similares como son comuniones o bautizos se limitarán a 25 personas como máximo en un espacio interior y 50 si es exterior. Ésta es la única medida que no entrará en vigor el mismo sábado sino el 1 de noviembre para que los actos ya previstos puedan adaptarse o modificarse, aún así, desde la conselleria recomiendan posponer estas celebraciones para cuando termine la emergencia sanitaria.
Las medidas se toman cuando la incidencia de casos por cada 100.000 habitantes es de 156 en Balears a 14 días (concretamente de 150 en Mallorca y de 173 en Ibiza). En sentido opuesto, la situación es especialmente favorable en Formentera, puesto que en los últimos 20 días solo se ha registrado un único caso, motivo por el que en esta isla se han flexibilizado ciertas medidas relacionadas con un menor nivel de riesgo de contagio.
Relajación en Formentera
En este sentido, Salut informó de que a partir de mañana se flexibilizarán las restricciones en Formentera. Frontera detalló que se incrementa a 10 el número de personas en reuniones de ámbito social y familiar en espacios cerrados y a 20 al aire libre.
Asimismo, se abrirán parques infantiles y se permite la reapertura de los locales de ocio infantil, con una capacidad del 50 %, y los clubes de personas mayores para la realización de actividades con un aforo máximo del 50%.
Además, los eventos deportivos podrán albergar el 75% del aforo, con un máximo de mil personas, aunque no se permite ni comer ni beber en las instalaciones cerradas.
En cuanto a los establecimientos de restauración, las terrazas podrán contar con un 75% del aforo siempre que se pueda asegurar que la disposición de las mesas permite el mantenimiento de la distancia de seguridad de un metro y medio.
En el ámbito cultural, teatros, auditorios y espacios similares pueden llevar a cabo su actividad si no superan el 75% de la capacidad permitida en cada sala.
En otros locales y establecimientos destinados a eventos públicos y actividades recreativas pueden desarrollar su actividad siempre que el público permanezca sentado y que no se supere el 75% del aforo permitido, con un máximo de 300 personas en espacios cerrados y de 1.000 personas al aire libre.
Los mercadillos pueden incrementar su ocupación hasta el 75% de los lugares autorizados en los que la posean más de 21 puestos. En caso de tener menos de 20 paradas, se permite la actividad simultánea siempre que se respete la distancia entre las mismas.
La presidenta del Consell de Formentera, Alejandra Ferrer, instó a los ciudadanos a «no relajarse en ningún caso» con el fin de «disfrutar» de la flexibilización. Además, Ferrer añadió que, aunque la movilidad entre territorios está permitida, «no debe significar que no tengamos la responsabilidad que toca». «Las restricciones son para las personas y no para los lugares», concluyó la presidenta insular.
Los casos activos descienden en Ibiza
El número de casos activos desciende en Ibiza después de que ayer se dieran casi medio centenar de altas, según los datos del Área de Salud de Ibiza y Formentera. Por contra, el Laboratorio de Microbiología biología detectó 36 nuevos contagios, 35 en Ibiza, de los que 34 han sido por PCR, y 1 en Formentera. Al mismo tiempo se dieron 49 altas que sitúan la cifra global desde el inicio de la pandemia en la 2.287 curaciones. Así, la cifra de casos activos desciende de nuevo hasta los 456 casos, 13 menos que el miércoles. En hospitalización aumentan los casos de 36 a 38, aunque descienden los ingresos en UCI que queda con dos pacientes en cuidados intensivos. 418 personas reciben seguimiento domiciliario por parte de los equipos de Atención Primaria, 416 en Ibiza y 2 en Formentera. Por último, siguen descendiendo los profesionales en vigilancia activa, que bajan de 34 a 32, de los cuales 6 son positivos, uno menos.
Las claves
1. Insistencia en el control de viajeros
El control de la pandemia pasa también por la inspección de la llegada de viajeros. Salut aseguró que sigue reivindicando al Gobierno de España «participar en el control de puertos y aeropuertos porque es más seguro y para saber quién llega. La situación ahora lo permitiría porque el volumen de los pasajeros es bajo», explicaron.
2. Un algoritmo para no colapsar las UCI
Un estudio con la participación del CSIC y la UIB propone un método a través de un algoritmo para asignar de manera óptima los pacientes de COVID-19 a los hospitales evitando que las Unidades de Cuidados Intensivos se vean desbordadas. Así, se podría ver el equilibrio de carga de cada centro para transferir a los pacientes críticos donde haya sitio.
3. 25 resoluciones validadas
La consellera de Salut, Patricia Gómez, explicó ayer que todas las resoluciones que se han tomado hasta ahora (más de 25) han recibido el visto bueno de la justicia balear. Cabe recordar que en el País Vasco se ha tumbado la limitación de las reuniones a seis personas propuesta afirmando que no es posible sin decretar antes un estado de alarma.