La asociación de profesores PLIS. Educación, por favor y Societat Civil Balear han solicitado a 291 directores de centros educativos de las islas, entre ellos a 37 de la isla de Ibiza y a dos de Formentera, que modifiquen sus proyectos lingüísticos «ilegales», con el fin de «acabar con la retrógrada inmersión total y obligatoria del catalán».
Ambas entidades presentaron el pasado 23 y 30 de octubre sendos requerimientos de modificación en el registro de entrada de la Conselleria de Educación porque «es hora de hacer cumplir la ley a los directores de centros escolares», alegaron ayer en una nota conjunta.
Por ello, han reclamado a 291 directores de centros de educación Infantil, Secundaria y Bachillerato del archipiélago que la lengua castellana se incluya en estos proyectos lingüísticos como lengua vehicular de la enseñanza, y que al menos el 25 % de horas lectivas en cursos y clases se realicen en lengua castellana.
Según sostienen ambas entidades, la Ley Orgánica de Educación (LOE) determina que la lengua castellana debe ser vehicular en al menos una asignatura troncal o análoga y no lingüística, además de la materia de lengua castellana y literatura, por lo que han instado a los directores de estos centros a que cumplan con esta norma.
Las asociaciones recordaron ayer que los proyectos lingüísticos son competencia del director del centro educativo y no del conseller de Educación, Martí March, ni del consejo escolar.
También anunciaron que el requerimiento presentado es un primer paso administrativo antes de acudir al tribunal contencioso.
Si transcurrido el tiempo perceptivo de este requerimiento administrativo, las entidades reciben una respuesta negativa, llevarán la solicitud a los tribunales.
La asociación de profesores y Societat Civil Balear han subrayado que este requerimiento se basa en el informe de 2019 presentado por el Defensor del Pueblo en el Congreso de los Diputados.
Según sostienen, en el informe del Defensor del Pueblo se recoge la jurisprudencia del Tribunal Supremo en la que se estable que la proporción razonable de enseñanza del castellano es «un mínimo de 25 % de horas lectivas y un mínimo de una asignatura troncal», además de lengua castellana o literatura.
Desde la Conselleria de Educación del Govern balear negaron esta interpretación y aseguraron ayer a Periódico de Ibiza y Formentera que «todos los centros de las islas cumplen con la normativa».
Educación sostiene que en Baleares no está establecido «un porcentaje mínimo de castellano», ya que «aplicamos el decreto de mínimos, de la época de Jaume Matas, que establece que se ha de dar un mínimo de un 50 % en catalán». También se aplica un decreto sobre el uso de lenguas extranjeras.
«Nuestro objetivo es que los alumnos acaben su ciclo educativo con competencias parecidas en ambos idiomas y este objetivo lo estamos consiguiendo gracias a que los proyectos lingüísticos de los centros ponen especial énfasis en la enseñanza del catalán, que es la débil socialmente», señalaron ayer desde Educación.