Govern y las patronales de Restauración de Balears acordaron ayer toda una serie de medidas de control sanitario que entrarán en vigor antes de las Navidades, entre las cuales resalta que los bares, cafeterías y restaurantes de las Islas deberán identificar a los comensales que consuman en el interior de estos locales, registro que se deberá guardar durante 30 días para facilitar el rastreo en caso de que se produzca un brote de coronavirus.
El conseller de Turisme i Treball, Iago Negueruela, tras finalizar la reunión con patronales, sindicatos y presidenta del Govern, Francina Armengol, puntualizó: «El registro no podrá tener una antigüedad mayor a 30 días y los datos se utilizarán sólo por parte de las autoridades sanitarias de Balears para realizar mejores labores de rastreo. Los datos serán confidenciales y sólo se recogerán los datos como nombre, DNI y número de teléfono a los comensales de interior de los locales».
La presidenta de PIMEM Restauración, Eugènia Cusí, manifestó sobre esta medida que «las empresas estamos asumiendo que podemos perder clientes con una decisión de este tipo y así se lo hemos hecho saber a la presidenta. Confiamos en que la gente pueda entender que dar un DNI permite que ese camarero tenga trabajo».
Para el presidente de Restauración CAEB, Alfonso Robledo el registro «nos parece invasivo, provocará molestias y estamos seguros que nos restará reservas y clientes».
Purificadores de aire
Las otras dos actuaciones que van a marcar la actividad en el sector de restauración son la instalación obligatoria de medidores de partículas de CO2 en el interior de los locales, cuya medición será accesible a los consumidores, «que podrán ver el nivel de estas partículas concentradas en espacios cerrados. Así se dará mayor seguridad a los clientes, empleados y empresarios», apuntó Negueruela.
Añadió que también se ha determinado la instalación de máquinas purificadoras de aire «si estos espacios no cuentan con ventilación natural». Negueruela explicó que se negociará con las patronales y sindicatos la partida que el Govern destinará en una línea de ayudas para los establecimientos que necesiten una inyección económica para adquirir esta maquinaria y velar por la ventilación adecuada en espacios cerrados. La partida superará con creces los tres millones de euros.
Respecto a las terrazas, destacó la apuesta del Govern porque los clientes continúen utilizándolas y no descartó la posibilidad de ampliarlas. Robledo y Cusí valoraron de forma positiva la actitud del Ejecutivo «porque todas estas medidas inciden en una mejora de la seguridad turística de Balears como destino vacacional para 2021».
Optimismo en Ibiza
En la reunión también estuvo presente la presidenta de Pimeef Restauració, Verónica Juan. Esta habló de «optimismo» ya que piensan que el 27 de noviembre se ampliará el toque de queda en Ibiza y los bares y restaurantes podrán volver a dar cenar. «No nos lo han asegurado, pero sí lo han dejado caer. Nos han explicado que la situación en la isla está mejorando mucho y que ya estamos cerca de unas cifras epidemiológicas aceptables», confesó Juan.
Para la representante de Pimeef esto es muy importante ya que, según explicó, le había trasladado al Govern que «la situación en Ibiza es crítica para el sector» y que no pueden seguir durante más tiempo en las condiciones actuales.
Sobre las nuevas medidas que se llevarán a cabo, señaló que «aún nos tienen que dar más información», pero recordó que «nosotros no tenemos demasiadas opciones. Podemos entrar a valorar y comentarles lo que nos parece, pero es el Govern el que dice esto es lo que hay».
Sí se mostró esperanzada con la posibilidad de que se pueda volver a servir en el interior y que se aumenten los aforos con estas normas. «Llega el frío y nosotros tenemos que seguir dando comidas y cafés», apuntó.
Por último, dentro de este optimismo moderado de cara al futuro próximo, la presidenta de la Restauración pitiusa anunció que en Pimeef ya están trabajando en una serie de acciones para poner en marcha el sector en los diferentes municipios de la isla cuando puedan volver las cenas.
En el Lidl, Mercadona y autobuses no hay que dar el DNI ni teléfono y en los bares-restaurantes si?