Sin resultado por segundo día consecutivo. La Guardia Civil removió ayer toneladas de tierra en la finca de las afueras de Binissalem donde buscan el cadáver de un hombre desaparecido en agosto y que supuestamente fue asesinado por Juan Torres Serra, un delincuente con numerosos antecedentes en Ibiza. En el operativo participan expertos geólogos que analizan posibles movimientos de tierra recientes.
A primera hora de la mañana, bajo una pertinaz lluvia, la Policía Judicial regresó a los terrenos inspeccionados el martes y cavó numerosos agujeros, en puntos sospechosos señalados. El mal tiempo complicó los trabajos, que se prolongaron durante todo el día.
Cae la noche
Al caer la noche, pasadas las 17.30 horas, se dieron por finalizados los trabajos y los agentes regresaron a la Comandancia, sin resultados.
Hoy por la mañana, por tercer día consecutivo, se reanudará el dispositivo, a la espera de algunas pruebas que el Laboratorio de Criminalística ha encontrado en la finca y está analizando. Los perros adiestrados marcaron algunos puntos, donde supuestamente podía haber manchas de sangre.
El perímetro exterior de la finca perLa Guardia Civil remueve toneladas de tierra en busca del cadáver de Binissalem permanece custodiado día y noche por la Benemérita, para que nadie tenga acceso al interior. Juan Torres Serra fue condenado a nueve años de cárcel por el secuestro de dos personas en Ibiza. En cambio, no se pudo probar su implicación en las desapariciones del abogado de Santa Eulària Antonio Ferrer Juan y del alemán residente en Santa Agnès Thomas Egner, ocurridas respectivamente en diciembre de 1997 y enero de 1998. Tampoco en la de Francisco López, en 2007. En los tres casos, las víctimas tuvieron relación con ‘El Pirata'.
El sospechoso pasará mañana a disposición judicial
Juan Torres Serra, ‘el Pirata', pasará a disposición judicial mañana por la mañana, tras pasar tres días en los calabozos de la Guardia Civil. El ibicenco no ha confesado y si no aparece el cuerpo que buscan en Binissalem no se descarta que quede en libertad, por falta de pruebas inculpatorias. El hombre desaparecido en Binissalem se llama Antonio y tiene una cincuentena de años. Compartía su finca con el sospechoso, y a finales de agosto desapareció de forma misteriosa. ‘El Pirata' siguió viviendo en esa propiedad. La finca está custodiada día y noche.