La decisión por parte del Govern balear de querer implantar un código QR para entrar estas Navidades en los bares, cafeterías y restaurantes sigue generando mucha polémica. Ayer por la mañana, la presidenta de PIMEEF Restauració, Verónica Juan, aseguró tajantemente a Periódico de Ibiza y Formentera «que no vamos a ser los restauradores los que nos vamos a hacer responsables de gestionar estos datos».
En este sentido, Juan explicó que «no interesa que se apliquen estas medidas porque todo lo que sea poner trabas al cliente no es bueno para un sector como el de la restauración que arrastra ya muchos problemas desde que comenzó la pandemia».
A pesar de ello, la presidenta de PIMEEF Restauració aseguró que están a la espera de ver cómo se desarrolla todo durante los próximos días. «De momento vamos a esperar para tomar una decisión definitiva porque nos consta que se están haciendo consultas jurídicas para ver cómo afectaría esta medida a las leyes de movilidad o de protección de datos».
Por su parte, el presidente de Restauración de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares (CAEB), Alfonso Robledo, explicó que «hay mucha preocupación entre los consumidores por la desinformación que hay en este proyecto» y criticó que «sus muchas incógnitas, con cambios continuos que provocan que no sepamos a qué atenernos en estos momentos».
Mientras, la presidenta de Restauración de la Federació de la Petita i Mitjana Empresa de Mallorca, Eugènia Cusí, aseguró que «el Govern está acostumbrando a dirigir a la población a base de decretazos evitando que los proyectos pasen por el Parlament». Además, dijo no entender que pongan al sector «en el punto de mira cuando hay otros a los no se va a exigir ningún tipo de medida para entrar, como si solo pudiera haber contagios en los restaurantes» y al mismo tiempo pidió «mejorar el radar COVID y usarlo como corresponde en esta pandemia».
Purificadores de aire
Mientras, con respecto a los medidores y purificadores de aire que los restauradores de Baleares tendrán que tener implantados antes del próximo 15 de diciembre, Verónica Juan confirmó a este periódico que ayer miércoles todas las patronales de las islas tuvieron una reunión mediante zoom con representantes del Govern balear.
En ella se les informó de las ayudas que ha puesto en marcha el ejecutivo, «confirmando que se adelantaría una cantidad fija para aquellos establecimientos que tengan que adquirirlos o hacer reformas en sus sistemas de ventilación». Según Juan estas ayudas estarían abiertas hasta el 21 de diciembre y posteriormente habría otras a partir de enero.
Así mismo, la presidenta de PIMEEF Restauració aseguró «que todos aquellos que quieran adelantar la inversión en estos aparatos para tener mayor aforo en sus establecimientos durante la Navidad podrán adelantar el dinero y luego será el Govern balear el que, tras presentar la factura y firmar una declaración responsable, abonará una cantidad fija que aún se está terminando de calcular».
Sin embargo, aunque todo esto se informó ayer a las patronales aún está pendiente de que se apruebe durante el próximo miércoles en el Consell de Govern.
Purificadores de aire en establecimientos de restauración antes del 15 de diciembre
El Govern balear, a través de su asesora técnica en materia de coronavirus, Marga Frontera, aseguró este pasado 27 de noviembre que todos los restauradores de Baleares tendrán que implantar antes del 15 diciembre medidores y purificadores de aire en caso de su calidad no sea la adecuada. En caso de no tener la instalación hecha correctamente se les puede sancionar aunque habrá un margen para informar antes que sancionar. El objetivo de esta medida «es evitar los contagios de coronavirus en el interior de restaurantes y posibilitar que estos negocios sigan abiertos» aunque desde el Govern se sigue recomendando en todo momento que las actividades se realicen siempre que se pueda en exterior.