El Ayuntamiento de Sant Joan, con unos 40 empleados, es la única administración de Ibiza que no registraba a día de ayer bajas entre sus trabajadores por la COVID-19. Los cuatro ayuntamientos restantes: Ibiza, Sant Antoni, Santa Eulària y Sant Josep; así como el Consell de Ibiza, cuentan con empleados públicos que se encuentran de baja o bien por estar afectados por el virus o por guardar la cuarentena por ser contacto estrecho.
El Consell tiene 25 trabajadores de baja, de los 750, aunque precisan que están «muy distribuidos entre diferentes servicios», por lo que no se ha visto afectado la atención que ofrece la máxima institución en las diferentes áreas.
En Santa Eulària, pese a que un 20% de los trabajadores que se encontraban de baja por COVID-19 ya se ha reincorporado a su puesto de trabajo, un total de 20 de los 350 trabajadores sigue de baja. En este caso, también destacan que no hubo ningún brote y que los afectados corresponden a diferentes departamentos y con sede en diferentes edificios municipales. Además, para el 15 de febrero está convocada la Comisión de Salud.
Vila registra cinco casos positivos y ocho personas en aislamiento preventivo, de los que seis están teletrabajando, sobre una plantilla de entre 400 y 450 personas.
Finalmente, Sant Antoni y Sant Josep cuentan, cada uno, con cinco trabajadores municipales de baja.