Empotrado contra un muro junto al paseo de Sant Antoni. Así ha acabado este mediodía un coche Mini que había sido estacionado sin el freno de mano bien asegurado en una rampa de acceso a un garaje. El vehículo se fue deslizando y tomando velocidad hasta llevarse por delante una valla de aluminio antes de ser frenado por un murete.
Hasta el escenario del siniestro se han movilizado agentes de la Policía Local de Sant Antoni y el propietario del vehículo.