A partir del lunes 17 de mayo volverá a estar activo el pago de las zonas de estacionamiento regulado en horario de tardes en Santa Eulària. El Ayuntamiento ha tomado esta resolución referente a la zona azul debido al incremento de actividad en los negocios y después de que el pago entre las 17.00 y las 20.00 horas haya estado suspendido en los últimos cuatro meses. Esta cancelación del pago de la ORA desde el pasado 25 de enero, y la gratuidad también fuera del horario matinal del aparcamiento del Paseo de la Paz, han supuesto dejar en los bolsillos de los ciudadanos cerca de 80.000 euros.
A finales de enero, y dentro del paquete de medidas aprobado por el Ayuntamiento para aliviar la carga económica sobre los ciudadanos, adoptó la resolución de permitir el estacionamiento libre en las zonas reguladas del municipio y del parquin público subterráneo situado detrás de la Casa Consistorial. Se conseguía así rebajar el gasto de los particulares que hacen uso de estos servicios aprovechando que existía una disminución muy importante de la actividad comercial. Ahora que dicha actividad ha recuperado vigor, y con el objetivo de que la zona azul cumpla con su cometido de incentivar la rotación de vehículos favoreciendo la accesibilidad a los comercios, se vuelve a activar el pago con normalidad.
El cambio significa que, desde el lunes, habrá que poner tique para poder aparcar en la zona azul entre las 17.00 y las 20.00 horas. Sólo entre semana puesto que, en el horario de fuera de temporada, los sábados por la tarde son gratuitos.
En el 2020 ya se tomó la resolución de suspender totalmente el pago de la ORA en las semanas más duras de confinamiento, aprovechando el cierre de la mayoría de locales y para favorecer que los desplazamientos fuesen durante el tiempo más reducido posible.
Igualmente, desde enero también se ha ofrecido la posibilidad de usar plazas de estacionamiento regulado como terraza para los negocios de restauración que no contaban con cenador. Esta medida, que se mantiene dado que todavía no se ha autorizado el uso del interior de los locales, pretendía garantizar un mínimo de actividad para los locales pequeños, con poca terraza disponible. Se contribuye así a sostener a un sector, muy castigado por las restricciones, y por tanto, a mantener también parte del empleo de la restauración.