La prueba de ocio nocturno que negocia el Govern con las patronales Ocio Ibiza y la Asociación Balear de Ocio Nocturno (Abone) se llevará a cabo a finales de este mes en un local de Eivissa y otro en Mallorca, en los cuales se aplicarán todos los protocolos de Salut para garantizar la seguridad.
La reunión que mantuvo este martes en Eivissa el conseller de Turisme i Treball, Iago Negueruela, con los representantes de Ocio Ibiza permitió conocer la estrategia del Govern en el proceso de desescalada con el ocio nocturno y la puesta en marcha de un proyecto piloto para probar los protocolos de Salut en esta oferta vacacional.
Este sector lleva cerrado año y medio y será el último en beneficiarse de la desescalada, de ahí que tanto Ocio Ibiza como Abone tienen puestas todas sus esperanzas en poder realizar una prueba piloto que pueda convencer al Govern de que sí se puede abrir con todas las medidas de seguridad.
La patronal ibicenca ha puesto encima de la mesa dos locales: el Ushuaia y el Hard Rock Café. Ambos cuentan con exteriores y amplitud para ubicar las zonas de baile con mascarilla, expedición de bebidas y área de consumo.
«Está por definir los horarios y el día en que se hará la prueba piloto, ya que se barajan el 25 de junio o el 2 de julio, pero el interés es máximo. El aforo en el local elegido por el Govern será del 50 % y el horario de cierre establecido será las doce de la noche», señalan las patronales del ocio nocturno.
El presidente de Abone, Miguel Pérez-Marsá, reconoce que la oferta de ocio nocturno es diferente a la de Mallorca «ya que allí imperan los beach club».
En Mallorca está previsto que se elija una sala mediana con un aforo de 300 personas, en el cual se podrán probar los protocolos sanitarios.
«El consenso y la colaboración con el Govern es completa porque ambas partes queremos que se reabra el ocio nocturno con todas las garantías. Entendemos que hay que ir con mucho cuidado, de ahí que pensamos que hasta mediados de julio no podrá operar esta oferta en la Isla», apuntó Pérez-Marsá.
Ocio Ibiza y Abone coinciden en que «nuestro sector no puede estar cerrado otra temporada de verano, de ahí el máximo interés por parte de las empresas de hacer las cosas bien, cumplir los compromisos que nos imponga el Govern y poner todas las medidas de seguridad para evitar cualquier tipo de incidencia. Los controles serán extensos y no habrá permisividad alguna con los clientes», indican representantes de ambas patronales.