La Asociación Profesional de la Guardia Civil, JUCIL alerta este lunes en una nota de prensa de "la disminución de efectivos destinados en Mallorca, Menorca e Ibiza con un catálogo de puestos que se ha visto mermado en los últimos años, sin que se hayan cubierto de manera efectiva las vacantes en las islas".
Denuncian que en la actualidad hay en Baleares un déficit de 400 agentes de la Guardia Civil, sobre un catálogo de 2.600 puestos de trabajo y alarmantemente, tal y como ha señalado Tomás Quesada “nos preocupa que el próximo mes de septiembre abandonen las islas 100 compañeros que han recibido la autorización para incorporarse a sus nuevos destinos en la península”. Quesada ha precisado “como, por ejemplo en Menorca la seguridad ciudadana en ocasiones haya tenido que ser cubierta por componentes de la patrulla fiscal y del aeropuerto y ante la ausencia de efectivos se den cuadrantes de trabajo insufribles plagados de los conocidos “dobletes” que dejan a los guardias civiles sin el descanso necesario y aconsejable para asumir con garantías las funciones que le son inherentes, organización de los turnos que están sujetos en no pocas ocasiones a continuas variaciones que imposibilitan cualquier tipo de planificación o conciliación familiar”.
Falta de efectividad y seguridad en Ibiza
También JUCIL denuncia que, ante la falta de efectivos en la isla de Ibiza, donde las funciones del servicio fiscal de la Guardia Civil en el puerto o la llegada de los ferrys son asumidas por patrullas de seguridad ciudadana que son desviadas de sus habituales cometidos.
Además, en Sant Antoni, "antes unidad de referencia en la isla, donde había destinados 120 efectivos ahora solo cuentan con una veintena de agentes para hacer frente a las labores de seguridad ciudadana y atención al ciudadano en plena reactivación de la temporada turística, restando capacidad de actuación y efectividad ante cualquier situación delicada", detallan.
Ante esta situación, JUCIL alerta de que con los actuales efectivos de la Guardia Civil no puedan ejercer los servicios de seguridad de manera adecuada ni atender los requerimientos de la ciudadanía en Baleares, que en estas fechas de verano multiplica su presencia, a través de los complejos turísticos, hoteles y apartamentos.
Posible crisis de seguridad
JUCIL insta a los responsables en materia de seguridad y a la delegación del Gobierno que analicen las condiciones en las que están trabajando los compañeros en las islas. Y respecto a la medida impuesta por la administración autonómica que prohíbe las reuniones sociales en el transcurso de la madrugada, tanto en interiores como en exteriores de personas no convivientes en Mallorca, Menorca e Ibiza, JUCIL "considera que con los efectivos que hay en la actualidad no se puede garantizar el cumplimiento de esta norma". Plus por residencia Para Tomás Quesada, secretario provincial de JUCIL en Mallorca, “está situación se viene arrastrando desde hace varios años sin encontrar una respuesta y solución por parte de las administraciones”. “Es necesario que se incentive a los funcionarios que vienen a trabajar en las islas y así se queden aquí prestandosusservicios, en las condiciones de idoneidad que aseguren la calidad de servicio que los ciudadanos de Baleares merecen”, ha defendido.
Según JUCIL "no existen incentivos económicos para permanecer en las islas, donde hay un elevado coste de los alquileres o compra de vivienda, la cesta de la compra y otros gastos cotidianos".
La Asociación Justicia Civil JUCIL, colectivo en la Guardia Civil, se creó en el 2018 con el objetivo de defender los intereses y derechos de los agentes de la Benemérita ante las instituciones.
Esta representación oficial surgió inicialmente a través de Jusapol, el colectivo de policías y guardias civiles de toda España, que demanda la equiparación salarial con el resto de laspolicías autonómicas. Actualmente JUCIL cuenta con más de 12.00 afiliados y representantes en todo el territorio nacional.