La agencia del medicamento norteamericana, FDA en sus siglas en inglés, ha calificado como medicamento huérfano el LAM561, un fármaco destinado al tratamiento de gliomas que produce la farmacéutica con sede en el ParcBit LaminarPharma y cuyo director general es el catedrático de Biología Molecular de la UIB Pablo Escribá.
Los medicamentos huérfanos son aquellos fármacos que no se desarrollan por la industria farmacéutica por razones económicas pero que responden a razones de salud pública; en la mayoría de los casos se corresponde con enfermedades raras y con una baja prevalencia, graves y sin tratamiento actual efectivo. El LAM561 es una molécula derivada del ácido oléico del que se ha demostrado una alta efectividad contra el glioma, un tipo de tumor cerebral muy agresivo frente al que no hay un tratamiento efectivo y mantiene una elevada mortalidad pocos meses después del diagnóstico.
La calificación de medicamento huérfano para el LAM561 supone el reconocimiento de la FDA (Food and Drug Administration) de su potencial beneficioso contra los gliomas, toda vez que esta organización norteamericana evalúa el balance entre el beneficio terapéutico y el riesgo asociado que conlleva en cualquier tratamiento. Cabe señalar, además, que el LAM561 ya ha finalizado los estudios clínicos en las fases I y II en pacientes con cáncer, en los que se ha demostrado su seguridad e indicación como actividad terapéutica. Este medicamento, según informa la propia farmacéutica en su página web, se administra por vía oral y su investigación en la UIB se inició hace más de cinco años.
LaminarPharma tiene previsto que a partir de 2023 el LAM561 ya podrá ser comercializado.
Ensayo en niños
Otra de las vías de investigación en las que están trabajando los investigadores de LaminarPharma en la actualidad es un ensayo de seguridad del fármaco en niños, el cual se realiza en Estados Unidos, al mismo tiempo que se está completando el último ensayo clínico internacional para demostrar su eficacia en el tratamiento de gliomas en pacientes adultos.
Este estudio, en el que se ha invertido ya un millón de euros, cuenta con el apoyo financiero de la Fundación Dana-Farber, cuyo principal objetivo es el cáncer infantil.
Cabe señalar que el próximo martes finalizará el proceso de ampliación de capital de la empresa, proceso con el que pretende seguir financiando sus investigaciones.