La Semana Santa en Ibiza y Formentera ha dejado muy buenas sensaciones y el turismo ha vuelto a resurgir tras dos años duros por la pandemia.
La Federación Empresarial Hotelera de Ibiza y Formentera ha valorado de manera positiva la ocupación registrada en los hoteles pitiusos durante estos días festivos, donde se ha llegado al 90 por ciento de plazas vendidas, según las primeras estimaciones.
Estos datos se han alcanzado principalmente en los días centrales de la Semana Santa, donde el turismo ha sido más notorio, según detallan a Europa Press. La patronal ha indicado que ha abierto un 10 por ciento de la planta hotelera.
La mejora de los resultados se debe, en buena parte, a la llegada del turismo doméstico, siempre más activo en estas fechas del año.
Asimismo, el regreso del turismo internacional, sobre todo del viajero alemán y británico, los dos mercados con mayor peso en la industria turística del archipiélago, también ha propiciado la gran ocupación durante la Semana Santa.
En otras zonas de Balears, como la isla de Mallorca, los hoteleros han destacado que la Semana Santa ha finalizado sin incidencias y con ocupaciones de entre el 80 y el 85% en algunas zonas turísticas y un ascenso en el número de operaciones en el aeropuerto de Palma.
El sector turístico, imprescindible en las Islas, lleva dos años acumulando pérdidas millonarias. Los cierres perimetrales y las diversas reestricciones provocadas por la pandemia de la Covid-19 han hecho que el turismo pase de representar el 12,3% del PIB en 2019 en España a bajar al 5,5% en 2020. En 2021, la cifra aumentó levemente, alcanzado el 7,5% del PIB nacional.
Tras estas buenas sensaciones, y pese a las consecuencias económicas que la guerra en Ucrania puede provocar en la recuperación, se estima que la temporada turística, tanto en Baleares como en el resto del país, sea muy positiva.