Tras varias semanas de celebración, Sant Jordi despidió sus fiestas ayer con el día grande, donde se conmemoró al patrón homónimo del municipio. Pese a que la lluvia tuvo en vilo a todo el pueblo, finalmente el día grande transcurrió con total normalidad.
A las 11 de la mañana fue el turno de la misa, a la que le seguiría el desfile de carros y, para finalizar, el tradicional ball pagès a cargo de la colla local y del Grupo de Danzas Estella-Lizarra de Navarra. «Tras dos años sin fiestas, la gente tenía ganas de salir y disfrutar. Por suerte, el tiempo nos ha permitido celebrarlo este año», explicó María, una vecina de Sant Jordi, a Periódico de Ibiza y Formentera .
Durante el mediodía las diversas asociaciones del municipio ofrecieron comida y bebida en la plaza del pueblo. Asimismo, también hubo puestos de floristerías y librerías ya que, como es bien sabido, en el día de Sant Jordi es tradición regalar una rosa y un libro.
«Salir hoy ya es una tradición en mi familia porque mi padre y yo somos ‘Jordi'. Entonces, siempre aprovechamos este día para hacer algo todos juntos», relató Jordi, un joven que disfruta del Día Grande del municipio.
Aunque la jornada de ayer fue el colofón a varios fines de semana de fiestas y actividades, el domingo actuarán La22 Formentera, al mediodía, y más tarde Amalian Folk.