El escaparate de la tienda de Pacha, en el puerto de Vila, es uno de los más llamativos y atractivos de toda la isla. Con el nuevo Real Decreto-ley de medidas de ahorro y y eficiencia energética en la mano, debería apagar las luces de ese vistoso escaparate a las 22:00 horas mientras siguen abiertos hasta la 1:00. «¿Qué hacemos? ¿Cerramos antes?», exclamó entre incrédula y sorprendida una de las empleadas al conocer la medida.
En este negocio desconocían el detalle de la norma que obliga desde este miércoles a poner la climatización a 27ºC como mínimo y apagar el alumbrado del escaparate a las 22:00 horas. «Me parece un tema que no merece ni opinión», indicaron, al tiempo que señalaban problemas más preocupantes como los vertidos de fecales en el puerto o el simple desarrollo de la temporada.
Desde el Govern, el conseller de Transición Energética, Juan Pedro Yllanes, tuvo que salir el lunes al paso de esta nueva normativa para explicar que se ha planteado una flexibilización en casos como el de los negocios que cierran después de las 22:00 horas y aseguró que se trabajaría por ayudar a las empresas a adaptarse con ayudas económicas. «Esa es la cuestión principal, y no inspeccionar, perseguir o sancionar», aseguró.
Declaraciones sobre unas medidas que la norma dice que se deben implementar ya, pero que los negocios apenas conocen y que, cuando se detallan, parecen poco realistas.
Desde luego, pasar por delante de las tiendas ha permitido este martes aliviar el calor de agosto y daba muestra del largo camino, en grados, que tendrán que recorrer los aires acondicionados de los negocios.
Un sinsentido
«Este Gobierno no tiene ni una idea buena», valoraba desde detrás del mostrador de la papelería Carlin Ivana.
El aire acondicionado estaba puesto a 22ºC «y ya, dependiendo de la gente que haya hace calor».
Así que surge la duda: «¿pero esto es obligatorio?». Es una ley, por lo tanto sí, aunque también es cierto que el texto no incluye el régimen sancionador, un tema que ha suscitado muchas dudas a las administraciones sobre su aplicación. El Ministerio de Industria indicó que sería de aplicación la Ley de Industria, que establece multas de 1.000 a 60.000 euros por incumplimientos.
Pero aplicarlo se considera hasta «peligroso» en algunos negocios. «El escaparate, sin luz, en esta calle se queda vendido. Nosotros tenemos reja, pero para el que no la tiene es quedarse un poco expuesto», insistió Ivana.
Raffa dice que se le «escapan los clientes si les pongo el aire a 27 grados». El dueño de la peluquería Raffaelle Rocco tampoco conocía las medidas. Según declaró no ve la televisión ni lee la prensa «porque sólo cuentan mentiras». Informado por encima de las medidas considera «una ley sinsentido».
Tampoco veía realistas las medidas la dependienta de la juguetería Al·lots, Andrea, que ha llegado este martes de vacaciones y se encontró con las nuevas medidas. «Acabo de buscarlas hace un rato en internet».
Poniendo por delante que «es necesario ahorrar», para ella el tema de los escaparates no será algo que afecte demasiado.
Los autónomos ya ahorran
En la Pastelería Granja Fina, la propia Fina Noguera ya tenía en marcha las medidas de ahorro. «Somos autónomos, ¿cómo no vamos a ahorrar?».
Aseguró que en su negocio se tira de aire acondicionado sólo en julio y agosto, «cuando se puede se abren las dos puertas y que pase la corriente».
Consideró que todo es cuestión de sentido común. Sin entrar a valorar temperaturas concretas indica que los negocios deberían evitar que haya un choque térmico manteniendo el confort de los clientes.
Tampoco tendrá que hacer mucho para adaptarse a la normativa Juana, de la tienda de mascotas y peluquería canina Can Pelut. El aire acondicionado ya lo tenía ayer a 26 grados. «A esa temperatura ya se está bien», valora. En su caso el aire está en la zona cerrada en la que se hacen los cortes de pelo y tratamientos a mascotas. Siempre correctamente cerrado, otro de los aspectos que indica la norma.
En la cafetería Sweet & Coffee, Rosalía expresaba resignación. «Las medidas las conocemos, son las que ha fijado el Gobierno y las tenemos que aceptar». Dijo haber recibido alguna queja de clientes por la temperatura del aire.
Desde su punto de vista son medidas que se debieron tomar antes. Encontrárselas de sopetón en pleno verano es el mayor problema.
El apunte
El Govern aclara que prevalece la norma de prevención de riesgos
Isaac Vaquer FerrerEl conseller de Modelo Económico, Turismo y Trabajo publicó ayer una instrucción en la que se informa de los supuestos en los que la normativa de seguridad laboral prevalece por encima del Real Decreto Ley de ahorro energético, en cuanto a la regulación de temperaturas. La instrucción, que ha sido redactada con el asesoramiento técnico del IBASSAL, recuerda que, como ya se venía aplicando hasta ahora, las condiciones ambientales de los puestos de trabajo, como es la temperatura o la humedad, están reguladas según el Real Decreto 486/1997, que establece «las disposiciones de seguridad y salud en los puestos de trabajo», como recuerda ya el propio RDL de medidas de ahorro energético que ahora entrará en vigor. Por tanto, serán las empresas a través de sus servicios de prevención (propios o ajenos) las que evaluarán, en cada caso, los riesgos laborales de cada puesto de trabajo, y que determinarán, por cada puesto, actividad y área, las temperaturas adecuadas que garantizarán la seguridad y salud de las personas trabajadoras.