Según relató Gianni, hijo del hombre que sufrió un ictus en un crucero de la cadena MSC, al periódico italiano Quinto Potere, Franco, su padre, tuvo infarto cerebral mientras cenaba con su mujer en el crucero con el que habían zarpado dos días antes.
«El domingo 14 de agosto mis padres se fueron de crucero en el MSC, el martes 16 mi papá tuvo un ictus durante la cena. Empezó a tartamudear, luego se le torció la boca y se quedó paralizado», explicó Gianni al medio italiano. Los sanitarios de la embarcación se llevaron al afectado de inmediato a la enfermería del crucero, en la que permaneció 14 horas «sin atención adecuada y sin que nadie pidiera más ayuda» manifestó el hijo. La situación del hombre se tornó más cruda y al llegar a Ibiza, al día siguiente sobre las 11.00 horas de la mañana, fue trasladado a un «hospital privado en el que tuvieron el valor de pedir 1700 euros por esto» continuó relatando Gianni.
Franco fue intervenido y, hasta el momento, se encuentra estable aunque según su hijo «no está fuera de peligro de muerte». Según explicó Gianni a Quinto Potere, los médicos del hospital en el que su padre ha sido intervenido dijeron que «papá no podía esperar 14 horas, tendrían que haber llamado a un helicóptero».
Los informes del MSC describen los hechos ocurridos la noche del 16 de agosto como a Franco en un estado de «confusión» que nada tendría que ver con un infarto cerebral.
Por otro lado, Gianni denuncia el haber tenido serios problemas para encontrar alojamiento para él y su madre mientras Franco seguía ingresado, y confiesa haberse gastado «más de 4.000 euros en alojamientos» tras haber pasado dos días en la calle a su llegada a la isla. «El consulado italiano se ha desentendido de la situación, la agencia de seguros que contrató mi madre tampoco cubre todos los gastos y tardaron 9 días en darle una habitación» añadió el hijo.
Vecinos y comerciantes del barrio natural de la familia, Carbonara, han iniciado una campaña de recaudación de fondos para ayudar a Franco.