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Chocolatada y bunyols de convivencia en el CEIP Sant Rafel

Cerca de 200 estudiantes de Primaria e Infantil han disfrutado esta mañana de una jornada festiva con motivo de las fiestas del pueblo

Chocolatada y bunyols de convivencia en el CEIP Sant Rafel. | Daniel Espinosa

| Sant Rafel |

Los niños y niñas del CEIP Sant Rafel han vuelto a disfrutar esta mañana de una gran chocolatada con bunyols que ya se ha convertido después de muchos años en un clásico del programa de fiestas del pueblo.

Según ha explicado esta mañana a Periódico de Ibiza y Formentera la directora del centro, Elena Cardona, el evento que se ha desarrollado en el patio ha sido todo un éxito con la participación de todos los estudiantes de Primaria e Infantil, con unos 200 en total disfrutando de un desayuno contundente a la vez que nutritivo.

La jornada ha comenzado con una serie de cuentos que han contado los más mayores a los más pequeños pero realmente ha ido cogiendo ambiente al mismo tiempo que el olor del chocolate invadía las instalaciones del colegio y ha llegado a su punto culminante con el mayor atractivo año tras año, los bunyols calentitos y recién hechos. «Todos los años el chocolate lo preparan un grupo de madres de la APIMA del centro y aunque gusta muchísimo lo que más éxito tiene son unos bunyols que cocinan en el momento antiguas madres que antes estaban en la asociación, de forma casera, súper sabrosa y que están para chuparse los dedos».

Además, según Elena Cardona, la jornada cuenta con el gran aliciente de ser un día de convivencia en el que los más mayores adoptan a los más pequeños generándose entre ellos una relación muy especial que luego se traslada al día a día. «Aquí somos como una gran familia y por eso es muy importante que los de 6º de Primaria vayan a buscar a un compañero suyo de 3 años, los de 5º a los de 4 años o los de 4º a los 5 años para pasar el día juntos y así que todos salgan beneficiados, los mayores porque adquieren responsabilidades y los pequeños porque se sienten seguros y descubren cosas nuevas».

Finalmente, precisamente con cada padrino y su ahijado de la mano, todos ellos han puesto camino hacia la carpa municipal del pueblo donde han podido disfrutar de una gran actuación infantil que ha preparado para ellos el Payaso Cachirulo.

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