La Sección Segunda de la Audiencia Provincial juzgó ayer a un joven de origen saudí que se enfrenta a una petición fiscal de 10 años por un delito de violación en Ibiza.
Los hechos juzgados se remontan a la noche del 15 de agosto de 2017 en el trascuro de una fiesta en la piscina de un hotel de Sant Antoni.
Según el relato de los hechos, el acusado, de 29 años, se encontraba en compañía de dos amigos cuando invitó a la víctima a continuar la fiesta en la habitación junto a otras personas. Ya en la habitación siguieron bebiendo alcohol, hasta que la mujer se mareó y se desplomó.
Cuando ya se habían quedado solos y según la acusación, el hombre penetró vaginal y analmente a la mujer, hasta que ella se despertó y le pidió que parase. No obstante, él continuó hasta eyacular ignorando sus gritos, según el fiscal. Después la mujer salió corriendo de la habitación y el hombre fue detenido horas después.
La Fiscalía pide, además de la pena de cárcel, una orden de alejamiento durante un periodo de diez años.
La víctima presentaba lesiones en un brazo, por las que reclama, además de por el daño emocional. La Fiscalía también solicita una indemnización de 10.000 euros.