La situación que atraviesa la Policía Local de Ibiza es, según una denuncia presentada por los sindicatos CCOO, CSIF y SPPME, «extrema». Así, en un escrito remitido a Periódico de Ibiza y Formentera, relatan situaciones inimaginables en otros departamentos de la Administración. Por ejemplo, los agentes recién llegados al cuerpo heredan los uniformes de los más veteranos. El material, aseguran, «escasea», hasta el punto de en este diciembre no los policías no han recibido aún las prendas de ropa que el Ayuntamiento tendría que haberles suministrado a principios de año.
Fuentes de los sindicatos consultadas por este periódico han explicado que el Consistorio «tenía que haber sacado a licitación el contrato para los uniformes en enero y febrero». Sin embargo, esto no sucedió «hasta septiembre». «Estamos en diciembre», señalaron, «y, aunque es verdad que han venido a tomarnos medidas, también lo es que no hay uniformes y que los veteranos están teniendo que dar parte de su ropa a los nuevos».
Chaleco antibalas entre tres
No quedan ahí los problemas. Según la denuncia de los tres sindicatos, ha habido ocasiones en las que «un chaleco antibalas ha tenido que ser compartido por tres policías y un casco entre dos». Algo que consideran «inadmisible» por «una mera cuestión de higiene». Por si esto no fuera suficiente, aseguran que los chalecos de seguridad personal que el Consistorio presentó el pasado verano como nueva adquisición «no son los que salieron en las fotos en prensa». «La foto que se publicó», señalan, «no era del material recibido, que es de menor calidad». Debido a esta situación, «los agentes están optando por comprar chalecos diferentes con su propio dinero». Y todo ello mientras aguantan que, cada vez que llueve, las goteras sean las protagonistas en diversas zonas de las instalaciones de la comisaría.
Los coches con los que patrullan los policías municipales de Vila son también, siempre según la denuncia de los sindicatos, otra fuente de problemas: «Están habitualmente averiados por la edad que tienen. Son obsoletos y su estado de mantenimiento es deplorable». El Ayuntamiento «ni siquiera se preocupa por la limpieza de los vehículos, que es inexistente». «En muchas ocasiones», señala la denuncia, «los agentes se avergüenzan de ello y deciden limpiarlos por voluntad propia antes de salir a patrullar».
Difícil es también el trabajo de oficina para estos policías pues, aseguran CCOO, CSIF y SPPME, los equipos informáticos «son heredados de otros departamentos» por lo que resulta misión imposible «encontrar un ordenador que funcione decentemente para realizar un informe o un atestado». «El 90% de los equipos», añaden en la denuncia, «no funciona o tiene un funcionamiento que impide trabajar».
En la misma nota, los tres sindicatos aseguran que los policías locales de la ciudad de Ibiza están «cansados de ver cómo los políticos realizan actos y se hacen fotos a bombo y platillo cuando han traído algún vehículo o han comprado programas como el de Eurocop». Y es que, añaden, «la realidad es que los vehículos son insuficientes y la implantación del programa ha sido casi inexistente y no se utiliza ni el 20%».
«Nadie quiere estar aquí»
El portavoz de CCOO en el Ayuntamiento de Ibiza, Juan Ortiz, ha recordado que «la Policía Local de Ibiza debería ser la referencia principal de las Pitiusas y una de las cinco primeras de Baleares». Sin embargo, «es todo lo contrario». Ortiz explica también que durante la actual legislatura ha sido habitual «que en la calle haya entre cuatro y cinco agentes», incluso en verano, «cuando la población y los servicios se multiplican». «Nadie quiere estar aquí por los medios de trabajo», lamenta, «y porque, además, el sueldo es el más bajo de todas las Pitiusas». A ello ha sumado que las políticas de recortes en la Administración han afectado especialmente a la Policía Local de Vila a pesar de que reducir el gasto en seguridad «tiene consecuencias para los ciudadanos, que son los que pagan esta nefasta gestión». «Para el Ayuntamiento de Ibiza, la Policía Local es un gasto superfluo».
El portavoz de CCOO ha afirmado que «los agentes están totalmente desmoralizados y asqueados» y que estos son los motivos por los que «en cuanto tienen la posibilidad de irse a trabajar a otro municipio, lo hacen sin dudarlo». «Lamentablemente», según concluye, «los responsables policiales y políticos no hacen nada por revertir esta situación».