El ya tradicional belén, que todas las Navidades montan en el patio de su casa los artesanos Jesús García, Traspas, e Isabel Delgado, Torijano, vuelve a lucir en Dalt Vila.
Una iniciativa que la pareja puso en marcha en 1999 para celebrar la declaración de Dalt Vila como Patrimonio de la Humanidad y que, 23 años después, sigue llamando la atención de los visitantes de la ciudad antigua. Visitantes a quienes un cartel invita a aplaudir para que, acto seguido, un gran búho les dé la bienvenida en forma de sorpresa. Todo un surtido de animales, ocas, cerdos, cabras, corderos, conejos, un flamenco acompañan a José y María, que permanece embarazada hasta la Nochebuena.
Entre todo el elenco animal que acompaña a la Santa Familia en el portal de Traspas y Torijano, tampoco faltan ratas y serpientes que, «ya se han convertido en parte de la fauna de la isla», explica Traspas.