La Dirección General de Tráfico (DGT) recomienda que las bajas temperaturas pueden provocar la aparición de placas de hielo «en cualquier momento». En caso de que nos pillen desprevenidos, «hay que levantar el pie del acelerador y no frenar hasta recuperar la adherencia. Mantener las ruedas rectas al salir de la placa y si es necesario, corregir la trayectoria con el volante», según explican en su página web.
También recomiendan que, en caso de placas de hielo y nieve en la calzada, se conduzca con «la máxima suavidad, tanto con el volante como con el acelerador o los frenos». Recomiendan, además, no fiarse de las zonas sombrías «en las que no da el sol», pues en ellas pueden aparecer «placas de hielo traicioneras». Y, sobre todo, circular con la velocidad adecuada. Para más información y detalles, puede consultar la página web de la DGT: www.dgt.es