Dramática matinal de viernes en Sant Antoni con dos muertes en cuestión de 4 horas. Una de las víctimas, John William McKenna, un turista británico de 22 años que se precipitó desde el balcón de la habitación del hotel donde se alojaba. La Policía Judicial de la Guardia Civil investiga las circunstancias de la muerte del joven futbolista. Cuatro horas antes, a las 07.00 horas, un hombre de 46 años era hallado muerto en otro hotel próximo. Todo apuntaba a una muerte por sobredosis.
Marihuana y crisantemos. Qué mejor lugar para pasar desapercibidas que un camposanto. Eso debió pensar el colombiano que había instalado su plantación de marihuana en un cementerio de Vila. El indeseable fue sorprendido in fraganti cuando se disponía a regar su maría con el agua de los contribuyentes. La Policía Nacional le intervino medio centenar de plantas: más de seis kilos de marihuana. La presencia de una báscula y otros efectos en su coche apunta a que no era para consumo propio.
Refriega italoargentina. El robo de un móvil fue el detonante de una refriega que se saldó con heridos por cortes y tres detenidos, dos argentinos y un italiano, el presunto ladrón. La reyerta ocurrió la madrugada del lunes en un bar de Vila. El dueño del móvil se fue al baño dejándolo sobre la mesa. A su regreso había desaparecido. Sus amigos le indicaron quién se lo había birlado. El señalado sacó a escena un cúter y el resto se armó con sillas. ‘Kill Bill'.
Breaking bad español. La Policía Nacional asestó esta semana un golpe definitivo a uno de los principales entramados de tráfico de drogas sintéticas con conexiones en Ibiza. ‘El Jefe', de 33 años, era el encargado de traer la materia prima desde los Países Bajos. La organización contaba además con los servicios de un licenciado en Farmacia, ‘El químico' o el ‘breaking bad español', según los investigadores. Para darle más color al business su madre regentaba una tienda de esoterismo en Barcelona.
Vuelos calientes a Ibiza para robar y huir con el botín en el equipaje. La Guardia Civil echó el guante el lunes a una célula de quinquis que aterrizaban en Ibiza para robar Rolex y luego regresar a Terrasa, localidad donde residían y daban salida a la mercancía en el mercado negro. Los agentes les pescaron en el aeropuerto a punto de embarcar rumbo a Barcelona con cuatro relojes.
Trifásico delictivo. Un Triple delito. La Policía Nacional arrestó el lunes a un camello colombiano que fue atrapado con drogas por los vigilantes de una discoteca. El «gran bulto» en uno de sus bolsillos le delató. En el cacheo los agentes le hallaron doce bolsitas de cocaína rosa: 13,2 gramos de 2CB. Además, el sujeto circulaba con un coche sustraído en Valencia y al que había doblado las placas. Suma y sigue. Al cruzar los datos la patrulla confirmó que estaba en situación irregular. Quedó libre tras pasar por la casilla de juzgados.
Serie. Succession (2018) de Jesse Armstron.