La Catedral de Ibiza se ha llenado este sábado de flores, de velas y de olor a incienso para festejar la celebración religiosa más importante de la isla: Santa María de las Nieves, patrona de las Pitiusas. Mientras los abanicos aleteaban dentro de la iglesia principal de la diócesis, el obispo de Ibiza y Formentera, Vicente Ribas Prats, ha comenzado su homilía agradeciendo la presencia de las autoridades públicas de las Pitiusas, haciendo una mención especial al presidente del Consell de Formentera, Llorenç Córdoba.
En este sentido, Vicente Ribas ha destacado, durante la misa solemne en honor a la patrona, que Santa María es madre de las dos islas. «Ésta es la casa de Ibiza y Formentera. Es la casa de tu pueblo también porque la patrona sólo quiere que ambas islas estén unidas», ha subrayado el obispo dirigiéndose al presidente del Consell. A su lado también estaban todos los alcaldes de la isla y el presidente del Consell d'Eivissa,Vicent Marí. Ha sido entonces cuando se ha dirigido a todos ellos para decirles que trabajen por el bienestar de todos los ciudadanos, cuidando los valores cristianos y pensando en el bien común.
Tras estas palabras, el obispo de las Pitiusas ha recordado que estas fiestas conmemoran los hechos de 1235 cuando las tropas cristianas expulsaron a las musulmanes de la isla. «Desde ese momento Santa María pasó a ser patrona de Ibiza», ha señalado mientras todos los asistentes, alrededor de 200 personas, escuchaban con atención su homilía.
Un discurso religioso que ha contado con la participación de medio centenar de cantantes del Cor Ciutat d'Eivissa que han deleitado con sus cantos litúrgicos a todos los asistentes que han llenado de devoción cada rincón de la Catedral. No quedaba ni un hueco libre en la nave central ni en las capillas laterales de la Catedral, incluso decenas de personas han tenido que presenciar esta misa solemne de pie.
También definió a la Virgen "como el orgullo de nuestro pueblo desde hace muchos siglos y ejemplo de caridad y amor, como el que se dan los católicos". Finalmente, tras finalizar la misa, se ha celebrado una ofrenda floral en honor a la patrona de Ibiza, Santa María de las Nieves. Un acto religioso y festivo que ha continuado con el espectáculo de ball pagès a cargo de los miembros de la colla de Vila.