El Ayuntamiento de Eivissa estudia en estos momentos la posibilidad de destinar una de las paradas del Mercat Vell a la venta de productos de primera necesidad. Ésta es la única alternativa que, como Administración, puede ofrecer a los vecinos del barrio de la Marina ante el cierre del único supermercado de la zona. «No podemos hacer más que esto», han señalado fuentes municipales consultadas por Periódico de Ibiza y Formentera, «no podemos destinar parte del espacio de sa Peixateria a un supermercado porque eso es algo que depende de la iniciativa privada».
Las mismas fuentes han explicado que, de cualquier manera, esta posibilidad no podría convertirse en una realidad hasta dentro de unos meses. Y es que aún están pendientes de ejecutar las obras de reforma del Mercat Vell. Una vez que estas se lleven a cabo, el Consistorio pondrá en marcha la adjudicación de las paradas que queden en este espacio. Y no será hasta entonces que pueda determinar que una de ellas sea dedicada a la venta de productos de primera necesidad. «Es un proceso largo», han admitido las mismas fuentes municipales, «pero no podemos hacerlo de otra manera».
El Consistorio, según han explicado, no considera que su papel sea el de facilitador de espacios para negocios que no dejan de ser privados. Y un supermercado, aunque sea necesario para los residentes y comerciantes de la zona, depende de la iniciativa empresarial privada, según destacaron.
La presidenta de la Asociación de Comerciantes de la Marina, Elisa Roselló, mostró su preocupación por el cierre del supermercado días atrás en una entrevista con Periódico de Ibiza y Formentera. Roselló señaló entonces que la entidad, junto con la Asociación de Vecinos de La Marina, iba a plantear a Vila la posibilidad de abrir un supermercado en sa Peixateria. Algo que justificó porque, en su opinión, sería un negocio, además de necesario, viable: «Estamos pendientes de ver qué se puede hacer o no en sa Peixateria. Está claro que será una iniciativa privada. En verano hay muchísima gente y en invierno hay más de la que parece. Yo no comprendería que alguien que se dedicara a la alimentación no apostara por esta zona. Cualquiera sabe que es una buena zona. Y hay otro elemento. Están todos los restaurantes y bares del barrio. Es verdad que compran al por mayor pero también necesitan cosas a diario y necesitan un supermercado».
El Ayuntamiento de Eivissa, sin embargo, no entiende el problema del mismo modo y considera que su función no pasa por facilitar espacios para negocios privados y que la única opción que tiene a su alcance es la de plantear que el Mercat Vell tenga una parada para estos productos de primera necesidad. Además, las mismas fuentes consultadas por este rotativo, han dejado claro que sa Peixateria será «sí o sí» un «gran centro cultural» que permitirá dar respuesta a las numerosas entidades que trabajan por la cultura en la ciudad y que ahora mismo no tienen espacios en los que desarrollar su labor. «Va a ser algo grande», han concluido, «y es una infraestructura que Ibiza necesita».
Si según la Sra. Roselló abrir un supermercado en la zona de la Marina "sería un negocio, además de necesario, viable", ¿por qué alguno de los miembros de la asociación de comerciantes no lo abre en uno de los numerosos locales de la zona que ahora en noviembre cuelgan el cartel de "se vende" o "se alquila"? Utilizar un equipamiento público para explotar una actividad privada con lucro no creo que sea muy ético, sin entrar a valorar otras cuestiones de carácter legal.