Todavía quedan números para el Sorteo Extraordinario de Lotería Nacional del Niño en las Administraciones de la Lotería de Ibiza, pero «muy poca cosa». Los interesados en probar suerte pueden comprar décimos durante la jornada de hoy porque la mayoría de las administraciones no estarán abiertas el día del sorteo, ya que además de ser un día festivo no es posible cobrar el premio sin que pase ante notario.
Las casas de lotería coinciden en que se ha vendido sobre todo en las últimas dos semanas ya que mucha gente lo utiliza como regalo de Reyes o canje de la lotería de Navidad. También depende mucho de la ‘resaca' que ésta haya dejado ya que los reintegros o premios ganados suelen canjearse en este sorteo. Según los datos de Loterías y Apuestas del Estado (LAE), los ciudadanos de Baleares gastan de media 9,53 euros en este sorteo, lo que sitúa al archipiélago como la tercera comunidad autónoma que menos gasta del país.
Sin embargo, las administraciones de Ibiza coinciden en que han incrementado sus ventas con respecto al año anterior. Sonia Saez, dueña de la Administración Nº 4 de Ibiza, explica a este rotativo que este año ha vendido «muy bien», al igual que ocurrió con el sorteo de Navidad. Han superado las ventas del año pasado, aunque asegura que siempre es diferente al aclamado premio de diciembre ya que «la cantidad que envían es menos y el tiempo también», pues aunque tengan números desde octubre o noviembre en general todas empiezan a vender el 22 de diciembre.
Al igual que Mercedes Mayans, que administra la Administración Nº 3 de ibiza, llamada Eivisort y coincide en que «en las primeras semanas parecía que la gente solo quería comprar Navidad», pero estas últimas dos semanas empezó lo fuerte. «Nosotros cerramos a mediodía y hoy [por ayer] no hemos podido; eso es que nos va bien, a un ritmo fluido. En el sorteo de diciembre ya superamos al año anterior y este va en camino, yo diría que hemos alcanzado hasta un 7% más». Juan Mayans regenta la Administración de Lotería Nº 1 de Ibiza y para él ha sido «parecido al año pasado pero un poquito más, faltan dos días para hacer el recuento pero calculo que estaremos en un 5%».
Otra modalidad son los receptores que, en vez de tener números propios directos de Loterías y Apuestas del Estado, los sacan por las máquinas electrónicas. Sin embargo, «estas navidades los premios más gordos los han dado receptores». Hace 17 años que Fina vende este tipo de números en Isidor Macabich y asegura que «ha habido un aumento considerable». Jorge llegó este jueves a media mañana a por su número y ya tiene la costumbre de comprarlo en este lugar. Él quiere que «que salga de máquina porque todos están en el bombo» y no cree que elegir un número en concreto le de más suerte. Fina regenta este local y ya tiene preparadas tres botellas de champán para brindar si allí se da la suerte ya que asegura que «nunca perdemos la esperanza de toque algo».
Al igual que Montse, quien juega a la suerte pero no es muy supersticiosa: «Yo en Navidad sí que me pongo más exquisita, pero en este sorteo no porque todos los números están dentro y todos pueden salir. Pero no te niego que si me sale un número que relaciono con algo me motivo más que con otros y no se ni por qué».
Juan Mayans alude a la resaca del ‘Gordo' la cantidad de compras que hacen los clientes: «La lotería de El Niño normalmente va un poco ligada a si ha habido alegría en el sorteo de la Lotería de Navidad; entonces mucha gente vuelve a jugar al reintegro y tira para el premio». En esto coinciden el resto de loteros de la isla ya que aunque no haya tocado nada en su décimo si pueden recuperar el dinero mantienen la ilusión de las fechas en volver a intentarlo. Aunque Mercedes Mayans considera que son más cautelosos: «Sí es verdad que la gente ahora se lo piensa un poquito más y que no invierten los premios que gastan al completo, igual si sacan 200 euros usan la mitad para comprar nuevos décimos».
Esta administradora destaca que El Niño da más ilusión a la gente porque «los premios son más variados y, además, hay tres reintegros, cuando en Navidad solo había uno» y, sobre todo, en su caso que puede presumir de haber repartido muchas pedreas y premios «pequeñitos pero bastantes».
Enrique Quilis tiene elegida Eivisort por excelencia: «Vengo aquí comprar el sorteo de El Niño como todos los años, como soy de aquí y de Valencia compro uno en cada lugar y lo comparto con mi pareja en este caso».