La forma en que hacemos nuestras compras ha cambiado significativamente en los últimos años, según revela un informe presentado este mismo jueves por Kantar Worldpanel. Aunque acudimos menos veces al supermercado, llenamos más nuestros carritos. Sin embargo, adquirir los productos básicos del hogar se ha vuelto un 47% más caro en los últimos cuatro años, lo que ha llevado a un aumento en la preferencia por las marcas blancas para proteger nuestros bolsillos.
El informe detalla que la cesta básica de la compra, que incluye aceite, arroz, café, detergente, galletas y otros productos esenciales, ha experimentado este aumento del 47% en su precio. Ante esta inflación, que afectó especialmente a alimentos (11,9%) y bebidas (8,9%) en 2023, los consumidores han recurrido cada vez más a las marcas blancas, que ahora representan la mitad del gasto total en la cesta de la compra de los españoles.
Mayte González, directora de Shopper & Media de Kantar, explicó que esta tendencia ha sido impulsada también por las cadenas de distribución como Lidl, Mercadona y Dia, que han promovido activamente sus marcas blancas, especialmente en productos de droguería. De hecho, el 58% de las compras en este segmento son de marca del distribuidor, y en el caso de la alimentación, el gasto en marcas blancas alcanza el 54% del total, según revela Kantar.
A pesar de esta inclinación hacia las marcas blancas, todavía el 30% de las compras se realizan con marcas de fabricantes, y solo el 10% de las cestas de la compra contienen exclusivamente marcas blancas. El 60% de los consumidores combinan ambos tipos de marcas, lo que sugiere que no todo se reduce al precio.
En términos de hábitos de compra, el informe indica que el consumidor medio va menos veces al supermercado, aproximadamente tres veces por semana en promedio, prefiriendo hipermercados y supermercados sobre los tradicionales mercados y fruterías.
Kantar señala que los consumidores eligen los hipermercados debido a la variedad de productos disponibles, lo que les permite llenar su cesta en menos visitas. En promedio, los consumidores visitan hasta siete marcas de supermercados diferentes en un año, aunque el 75% de sus compras se concentran en solo tres enseñas, siendo más de la mitad en la primera preferida. Esta dinámica de compra refleja una evolución significativa en los hábitos del consumidor y su enfoque en la relación calidad-precio.