Por otro lado, el balance de Cáritas Ibiza de 2023 recoge que de los 2.960 usuarios atendidos, un 53% fueron mujeres. La mayoría de estos usuarios, el 20,81% eran españoles, seguidos de colombianos (20,37%), paraguayos (16,72%), marroquíes (9,05%), ecuatorianos (4,49%) y argelinos (3,04%). El resto, un 25,51%, procedía de otros países.
En su programa de acogida, considerado como la «puerta de acceso» a Cáritas, la entidad atendió en 2023 a más de 1.600 personas, de las cuales un 66,13% procedía de América y un 21,96% de España. En lo que al reparto de alimentos se refiere, Cáritas entregó más de 100.000 kilos el año pasado, con un valor total de 200.000 euros. En el centro socioeducativo de Betània fueron atendidos 383 beneficiarios, con edades de entre 0-11 años y más de 66. El grupo más mayoritario fue el de usuarios de entre 18 y 35 años.
En cuanto al programa para personas sin hogar, que cuenta con centro de día y comedor social, fueron atendidas 241 personas. El perfil medio de estas es el de un varón de entre 36 y 65 años, sin hogar y extracomunitario. Un 22% de las personas atendidas fueron mujeres y un 31% españoles. El comedor social entregó casi 15.000 menús elaborados por la residencia Reina Sofía, con un valor cercano a los 100.000 euros.
La empresa de inserción de Cáritas, Retexsol, incrementó su labor en el área del reciclaje de ropa donada a través de contenedores. A lo largo del año se recogieron 334.000 kilos de textiles, con el trabajo de las personas en riesgo de exclusión contratadas por Cáritas. En cuanto al programa de empleo, finalmente, la entidad atendió a 400 personas y logró 77 inserciones laborales.