El inicio oficial de la temporada turística en Ibiza trae consigo, inevitablemente, un aumento del tráfico debido al aumento de población flotante y a la llegada de turistas, muchos de los cuales optan por alquilar un coche.
El aumento de presión demográfica en Ibiza ya se nota muchísimo en las carreteras. De hecho hay que ir con especial cuidado y mucha atención para evitar sustos y golpes al volante.
El tráfico se vuelve especialmente denso cuando amanece un día como el de este viernes: gris y con mal tiempo. Por ello, muchos turistas han optado por visitar la ciudad de Ibiza, generando un importante colapso en los accesos a Vila, así como en las carreteras alrededor de la ciudad y en las calles de dentro del municipio. A modo de ejemplo, desde el barrio de es Viver hasta la calle Madrid esta mañana se ha tardado 35 minutos debido al colapso en los accesos y calles interiores.
Después de una mañana complicada, el cielo se ha despejado por la tarde y, con ello, se ha retomado la normalidad en el tráfico.