El alcalde de Ibiza, Rafa Triguero, se ha reunido este martes en Can Botino con la coordinadora de Retos Demográficos de la dirección general de Política Regional y Urbana de la Comisión Europea (CE), Valentina Corsetti. Un encuentro en el que Triguero ha trasladado a Corsetti el proyecto del Consistorio de reconvertir 22 espacios municipales hoy sin uso en viviendas públicas. Los detalles del mismo se darán a conocer el próximo mes de septiembre, cuando el Gobierno municipal presente el plan de Agenda Urbana, que contempla actuaciones en vivienda, movilidad y sostenibilidad.
El alcalde ha explicado que «hay que dar salida» a estos inmuebles municipales, ubicados principalmente en los barrios históricos de Sa Penya y Dalt Vila, con el fin de afrontar el grave problema de vivienda que sufre la ciudad. En estos momentos, ha señalado Triguero, hay 1.007 familias inscritas como solicitantes de vivienda, a las que Vila ha de «posibilitar» el acceso a un hogar. «Esto encaja perfectamente y más si son en barrios diana», ha añadido el primer edil. Triguero ha explicado que se trata de edificios, inmuebles administrativos y locales comerciales «que se pueden posibilitar para ese uso».
Durante el encuentro con Corsetti han analizado, además, los motivos por los que el anterior Gobierno municipal, dirigido por el socialista Rafa Ruiz, no llevó a cabo las acciones previstas en materia de vivienda y para las que contaba con una partida de 4,6 millones de euros de los fondos europeos. Un dinero al que el entonces alcalde renunció por no haber llevado a cabo el programa de Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado, más conocido por sus siglas como EDUSI. Vila recibió estos fondos en el primer mandato de Ruiz, que había propuesto adquirir edificios para, una vez rehabilitados, poder destinarlos al alquiler social. El Consistorio puso en marcha un concurso para intentar comprar el edificio okupado de Es Viver, pero quedó desierto. Propuso a Hacienda como alternativa la rehabilitación de 11 viviendas en Sa Penya para alquiler social pero el ministerio rechazó el proyecto tras conocer que estos pisos serían destinados a policías nacionales y no a familias socialmente desfavorecidas. También rechazó la posibilidad de rehabilitar espacios o viviendas municipales para su conversión en vivienda social, que es precisamente lo que ahora plantea nuevamente el Gobierno de Triguero.
Modernización
En su reunión con Valentina Corsetti, el alcalde ha subrayado que Vila quiere «desarrollar un gran plan de modernización de edificios municipales» con el objetivo de «minorar el gran drama social» que supone la falta de vivienda a precio asequible en la ciudad. Por ello, el Gobierno municipal trabaja ya en este plan de Agenda Urbana, que está llevando a cabo la concejalía dirigida por Rubén Sousa. Un plan que se trasladará tanto a la UE como al Ministerio de Hacienda con el fin de conseguir los fondos necesarios para ejecutarlo en un plazo de ocho años.
Rubén Sousa, por su parte, ha explicado que se trata de «una nueva estrategia de ciudad que será imprescindible para la transformación» de la capital ibicenca. El documento, ha añadido, «será clave para poder contar con los fondos de la UE y acabar con los problemas de movilidad y vivienda, haciendo una ciudad cien por cien inclusiva». Todo ello, además, tomando las decisiones necesarias para evitar que vuelva a producirse lo que Triguero ha calificado de «gran fracaso» del anterior Gobierno municipal.
Valentina Corsetti, por su parte, ha recordado que la UE «sigue invirtiendo en desarrollo urbano integrado y sostenible» y que ahora es el momento de «planificar las nuevas inversiones del nuevo periodo de programación, que viene con más fondos». En este sentido, Corsetti ha explicado que España recibirá 1.800 millones de euros «para el desarrollo urbano integrado». Podrán acceder a estos fondos «las mejores ciudades con los mejores planes». Unos planes en los que tendrán especial interés las estrategias integradas y la participación ciudadana. Estos planes, además, deberán ir en consonancia con las «grandes prioridades» de la Comisión Europea, que pasan por la transición verde, la transformación digital y la inclusión social.
Corsetti ha alabado que el Consistorio de Ibiza esté «alineado con estas grandes prioridades» y ha mostrado su confianza en que pueda acceder a las ayudas europeas necesarias para activar esta transformación del municipio.