Los taxistas del municipio de Sant Josep aseguraron ayer estar al límite, resaltando su hartazgo debido a los enfrentamientos que se registran entre profesionales del gremio «por culpa de la orden de carga y descarga ya que no funciona».
La asociación de taxistas de este municipio lamentó que, principalmente en las paradas del aeropuerto «no se respeta nada». En este sentido, estos profesionales afirmaron que los conductores de otros municipios incluso desatienden sus zonas puesto que prefieren desplazarse al aeropuerto para trabajar. «Una vez que éstos entran en la bolsa del aeropuerto sin que haya servicios en la parada, ya no la abandonan hasta que consiguen recoger pasajeros (cuando deberían haber abandonado la parada antes). Este es el principal motivo por el que hay disputas entre taxistas de los diferentes municipios», aseguraron los conductores de Sant Josep, recordando que la actual orden de carga señala que, si no hay clientes en la parada, los taxis de otros municipios deben abandonar el lugar.
Desde Sant Josep afirmaron además que el 80% de los taxis de otros municipios que abandonan la parada del aeropuerto no vuelven a sus municipios para dar servicio a sus paradas «desatendidas» y suelen optar por dirigirse a Platja d´en Bossa, aunque la zona esté cubierta por vehículos del municipio «pasando puerta por puerta de los hoteles y captando clientes que ya han solicitado un taxi a través de una llamada o de la App».
El colectivo de taxistas josepins aseguró también entender el «caos circulatorio» existente, «jamás visto antes». Según consideró, parte de culpa radica en la polémica orden de carga puesto que taxis de todos los municipios vuelven a las instalaciones aeroportuarias y colapsan el carril de circulación, aunque sean suficientes los taxis del propio municipio para cubrir los servicios.
«No entendemos por qué se ha impuesto una orden de carga como la que tenemos actualmente. El principal motivo que se nos dio en su momento fue que así los clientes esperarían menos para coger un taxi, cosa que es mentira. Un cliente no espera más porque un taxi del propio municipio llegue a la bolsa y adelante a todo aquel que sea de fuera del municipio. Al cliente ni le afecta, ni lo nota, ni lo ve», insistieron.
Al mismo tiempo, aclararon que un taxi es una concesión de un ayuntamiento y en Sant Josep se han llegado a cobrar 190.000 euros por una licencia para trabajar en el municipio, mientras que en zonas como Sant Joan el coste de la licencia es menos de la mitad. «Los precios de las licencias de cada ayuntamiento van ligados a la cantidad de trabajo de cada municipio. Por este motivo es injusto que se elimine la preferencia municipal, ya que Sant Josep tiene las licencias más caras y se está regalando parte de nuestra facturación a los demás municipios», manifestaron.
Los taxistas de Sant Josep exigieron ayer que se restablezca la preferencia para el taxi municipal, ya que no es «nada justo». Según apostillaron, se han dado situaciones en las que habiendo cuatro o cinco servicios en una parada, éstos han sido atendidos por taxis de un municipio ajeno.
«Esta orden de carga no funciona ni funcionará, a no ser que haya inspectores y Policía en todas las paradas las 24 horas del día para hacerla cumplir. Por último, el hecho de que los taxistas no cumplan la orden de carga ha provocado la pérdida del respeto, convirtiéndose en una incesante trifulca», concluyeron.