Entre Cala Bassa y la Torre d'en Rovira y también en Platges de Compte se celebra estos días el Ibiza Cliff Tour, una competición de saltos al agua organizada por la marca Free Life, propiedad de Pol Alberdi, y que, según han indicado fuentes del Ayuntamiento de Sant Josep, carece de los permisos necesarios para ello. Las mismas fuentes han señalado que la Policía Local investiga en estos momentos los hechos y han indicado que la organización se expone a multas que oscilan entre los 30.000 y los 300.000 euros.
En YouTube y en Instagram se han publicado numerosos vídeos sobre esta competición en la que los participantes saltan desde los acantilados al agua, sin ninguna medida de seguridad. En alguno de los vídeos se observa a los participantes, además, disfrutando de los saltos en lo que parece la piscina de una villa.
Fuentes del Consistorio josepí han lamentado «una vez más la organización de este tipo de actividades en el municipio». «Se trata de una actividad ilegal en el sentido de que carece de cualquier permiso municipal dadas sus características», han añadido. Además, han explicado que esta actividad «pone en riesgo la integridad de sus participantes y propicia la masificación en entornos naturales». Factores contra los que, han subrayado, «el Ayuntamiento está trabajando para erradicarlos».
En el caso de esta competición, el Consistorio ha admitido que la organización solicitó permiso para llevar a cabo la grabación del evento. Un permiso que fue denegado porque, entre otras cuestiones, no habían pedido la autorización necesaria para celebrar la competición. Por ello han indicado desde el Ayuntamiento que los organizadores «están infringiendo la normativa conscientemente».
Las mismas fuentes han señalado que «lo más probable es que también se les hubiera denegado la autorización para celebrar la competición» en base a cuestiones como la falta de seguridad de los participantes y, sobre todo, la «necesidad de acabar con la masificación» de unos entornos naturales que esta temporada turística se están viendo especialmente afectados por la presencia de un gran número de visitantes.
Desde el Ayuntamiento de Sant Josep han señalado que «es desesperante combatir la masificación en estas condiciones». Y es que se han dado casos realmente graves como la celebración de una fiesta ilegal por parte de DJ Diplo o «clases de yoga sin ningún tipo de permiso y con un montón de gente».
«Este verano», han añadido, «estamos viendo un montón de actividades realizadas sin ningún tipo de permiso. Los promotores no nos lo están poniendo fácil. Hablamos de espacios naturales que ya están de por sí masificados y que requieren de más cuidado y control». Y han apelado a la necesidad de que toda la sociedad «esté concienciada de la necesidad de acabar con este problema». «Hasta ahora», han añadido, «se ha trabajado desde la perspectiva de la advertencia. Pero hay que empezar a ser contundentes porque estamos viendo que la única solución es la de poner multas elevadas a los organizadores».
La organización ha desmentido al Consistorio y que ha asegurado que sí dispone de un permiso de Costas para la celebración de esto. Aun así, desde Sant Josep afirman que no disponían de los papeles necesarios. «El único permiso del que tenemos constancia es de una autorización de ocupación de dominio público marítimoterrestre por parte de la Conselleria de la Mar», señalan desde el Ayuntamiento.